Un villancico de 200 voces blancas

Los alumnos de Primero y Segundo de Secundaria del centro educativo Bienaventurada Virgen María, más conocido como las Irlandesas de Bami, comenzaron la mañana colocando un ejército de sillas rojas en el escenario del salón de actos de su colegio. Cuando todas estaban en su sitio, la profesora de música Rosa Isabel Moreno Fernández situó a sus alumnos en la parte izquierda del escenario.

En menos de media hora, el pequeño auditorio improvisado se llenó con niños de los últimos cursos de Primaria de otros tres centros de la provincia: el CEIP Blanca de los Ríos, de San José de la Rinconada; el CEIP San Roque, de Arahal; y el CEIP Nuestra Señora del Águila, del barrio sevillano del Cerro. Los estudiantes de estos colegios, junto con los de Highlands (Montequinto), serán los que pongan voz al cuento musical navideño El sueño de Anita en la actuación que tendrá lugar en el Pabellón Cubierto Municipal de Bormujos (C/ José Luis Caro) el próximo 21 de diciembre. Una narración que ha sido escrita por Anasun Cuadro.

"La protagonista es una niña que, después de ver la cabalgata de Reyes Magos, se queda dormida al llegar a casa y tiene ocho sueños", explica Fran Muñoz-Reja del Pozo, el promotor de la idea. Los sueños a los que hace referencia se corresponden con ocho villancicos infantiles que Muñoz-Reja ha creado a lo largo de su trayectoria como profesor y compositor.

La temática de las canciones es muy variada, dentro del carácter navideño de este musical. El proyecto cuenta con un villancico basado en la tradición andaluza, otro clásicamente norteamericano -"con sus copos de nieve", apunta Muñoz-Reja- y también hay uno de fragua gitana. Además, el creador incluye una antífona gregoriana adaptada para niños y una nana que compuso para su hija pequeña. Asimismo, el cuento tiene dos villancicos, donde la Virgen regaña a San José: el primero por entretenerse en las tareas del hogar y el segundo por despertar al Niño a base de estornudos. Para completar el musical, hay un tema dedicado a los niños del colegio Nuestra Señora del Águila -en el que trabaja Muñoz-Reja como profesor-, que trata de un partido de fútbol entre ángeles y demonios.

Enrique González Pol, el escritor del libreto, ha sido el responsable de dar sentido a esta amalgama de historias. La orquestación ha sido llevada a cabo por Miguel Ángel Bezanilla Naranjo, que también ha compuesto las partes incidentales del cuento musical, y por Jose Javier Delgado Pulpillo. El acompañamiento musical del día del concierto correrá a cargo de la Orquesta Sinfónica Joven del Aljarafe (OSJA), dirigida por Pedro Vázquez, que destaca el componente educativo que rodea el proyecto: "La OSJA está formada por alumnos del grado medio del conservatorio de Sanlúcar la Mayor, que con esta actuación sabrán lo que es tocar ante un auditorio de 1.000 personas".

Por otra parte, la idea de Muñoz-Reja no es sólo crear un espectáculo musical, sino que su iniciativa tiene también un factor pedagógico. A primeros de año, se editará un libro que recoge la historia, el libreto y los villancicos; tanto la letra como las partituras. De esta manera, se quiere proporcionar a los profesores de música un recurso didáctico que pueden utilizar durante sus clases.

Además, el concierto del 21 de diciembre tiene un carácter solidario. El Ayuntamiento de Bormujos ha puesto a disposición del proyecto las instalaciones donde se celebrará, por lo que la recaudación total se dedicará a varias entidades benéficas, como Aldeas Infantiles, Cáritas, Bormujos Solidario y la Asociación Sevillana de Daño Cerebral Adquirido (DACE).

Antes del gran día, los pequeños tendrán que reunirse varias veces, ya que el primer ensayo se desarrolló a principios de la semana pasada. La mayoría llevan practicando en los recreos y durante las clases de música desde que comenzó el curso, pero había un poco de incertidumbre sobre el resultado de la primera toma de contacto de muchos de los niños. Las dudas se disolvieron en este primer encuentro, ya que, pese a la complicación de reunir a dos grupos de sopranos y contraltos que nunca han cantado juntos a dos voces, el ensayo dio buen resultado. "Al principio cantábamos flojito, pero luego ya lo hemos hecho bien", explica Reyes de Miguel, alumna de las Irlandesas de Bami. Como el resto de sus compañeros los titubeos fueron sustituidos por ilusión. La ilusión que seguramente tenía Anita en aquella noche de Reyes Magos.