La Guardia Civil ha detenido a un hombre natural de Chiclana (Cádiz), de 33 años de edad, acusado de la muerte de un taxista chiclanero, conocido como el Pirri, de 43 años de edad. Todo apunta a que el móvil del crimen fue el robo. El cadáver de la víctima fue hallado por los agentes en el interior del propio taxi, que conducía el agresor, después de que una patrulla le diera el alto en un paraje de Sancti Petri, en un camino forestal denominado Pista Nueva y que conduce a la playa.

El hecho de que el detenido también se haya dedicado al sector del taxi anteriormente hizo pensar en alguna rencilla interna o alguna venganza personal, pero posteriormente se supo que el presunto homicida fue expulsado del gremio, al parecer por problemas con las drogas.

El taxista asesinado murió degollado con una navaja que era buscada ayer en las inmediaciones del lugar de los hechos por la Guardia Civil. Después del intento de robo que acabó con la muerte del homicidio del Pirri, su agresor metió el cadáver en el taxi y se puso al volante, conduciendo en dirección a la urbanización de Roche, posiblemente con la intención de deshacerse del cadáver en alguna zona recóndita.

Pero se topó con una patrulla de la Guardia Civil, que se extrañó de la presencia de un taxi por los alrededores a esas horas. También les llamó la atención la forma, excesivamente conservadora, de conducir, como no queriendo levantar sospechas, por lo que decidieron darle el alto. Los agentes de la Benemérita le hicieron salir del coche, y ante su nerviosismo, comenzaron a realizar una inspección más a fondo del vehículo. En el maletero vieron rastros de sangre. Al abrirlo, se encontraron con el cuerpo sin vida del taxista.

"Era una persona maravillosa, callada y amable", así resumió un taxista de Chiclana la personalidad de su compañero de profesión.Otros taxistas de esa ciudad también coincidían en que el presunto homicida era una persona "muy conflictiva" y ya había protagonizado varios episodios controvertidos.

Alrededor de una quincena de taxistas se desplazaron con sus vehículos hasta cerca del Ayuntamiento y realizaron un paro laboral de una hora entre las diez y once de la mañana. Además, los taxis chiclaneros portaron un crespón negro en sus antenas en señal de luto por la muerte de un compañero.

En la misma línea, la Federación Andaluza de Autónomos del Taxi (FAAT) expresó su condena y su pesar ante la muerte del taxista "supuestamente a manos de un cliente que había sido taxista en el pasado. Se trata de un trágico suceso que pone de manifiesto la vulnerabilidad del sector, que se convierte en ocasiones en un blanco fácil para este tipo de hechos".