El juez envía a prisión al transexual acusado de la muerte de una anciana

María Soto se defendió antes de morir. A sus 92 años tuvo fuerzas para dejar huellas de su lucha en el cuerpo de Emilio F. G., transexual conocido como Lucy, señales que resultaron claves para que la Policía Científica lo incriminara a las pocas horas de descubrir el cadáver de la anciana en su del barrio de Guillén Moreno, en Cádiz. El juez ordenó ayer el ingreso de Emilio F. G. en la prisión de Puerto II acusado de asesinato y robo con violencia.

La Policía ve indicios más que probados de que el presunto autor de la muerte de la mujer entró en la vivienda de María Soto gracias a las llaves que su hermana tenía de la casa. A las dos mujeres les unía cierta amistad, y la especial vulnerabilidad de la anciana, que cuidaba a una hermana enferma de alzhéimer, le hacía centro de más atención por parte de sus vecinas. Sin embargo, esto acabó por costarle la vida. Porque la Policía piensa que cuando Lucy entró en casa de María con una bolsa de plástico en la que pensaba llevarse su botín -alguna joya y dinero- y que acabó sirviéndole para, presuntamente, asfixiar a su víctima, tenía decidido dar el golpe de su vida.

El transexual sabía que María y su hermana cobraban sendas pensiones y que, por su edad, tenían la vieja costumbre de sacar el dinero íntegro del banco y guardarlo en casa. Lucy se llevó los fajos de billetes de 50 y 20 euros que rondaban los 20.000, la calderilla, la cadena de oro y un par de anillos.

Lucy tiene antecedentes penales de finales de la década de los 70 y principio de los 80. Por robo con violencia e intimidación y por escándalo público, exhibicionismo y provocación sexual, todos delitos cometidos en Barcelona, donde estuvo residiendo.

Por otra parte, la juez titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Málaga, Concepción Montoya, también decretó ayer el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, del hombre detenido acusado de apuñalar mortalmente el pasado martes a su expareja, Verónica Frías, de 24 años, en Málaga.