El pasado jueves el Pleno de la Diputación aprobó el Plan de Cohesión Social e Igualdad con un presupuesto de 59,8 millones de euros y, como expresó el presidente de la entidad supramunicipal, Fernando Rodríguez Villalobos en su presentación ante los medios de comunicación, el Plan "regirá las políticas sociales de la provincia entre 2016 y 2019, aunque anualmente se revisará su financiación".

La nueva edición del Plan contempla novedades importantes con respecto a otros años y, así, tomando el ejemplo de la propia institución provincial, y en respuesta a peticiones de algunos alcaldes, los ayuntamientos podrán incorporar en prácticas a jóvenes que presentan una discapacidad intelectual, contando con una aportación económica -unos 200 euros- de la Diputación. Esta nueva iniciativa del Área de Cohesión Social e Igualdad de la Diputación tiene como objetivo específico incrementar el número de entidades públicas que contribuyen en el ámbito local a la inclusión social de este perfil de población.

Para ello se promoverán convenios bienales que favorezcan el efecto multiplicador de la cooperación coordinada y conjunta entre las distintas administraciones y la iniciativa social, así como un apoyo económico a los ayuntamientos, favoreciendo que los espacios en los que se desarrollan las prácticas de inclusión socio laboral se encuentren lo más cercano posible al municipio de residencia del joven con discapacidad intelectual.

Para el presidente de la Diputación, Rodríguez Villalobos, esta iniciativa la considera "trascendental", ya que de esta manera los jóvenes de los municipios que presentan este tipo de discapacidad tienen la oportunidad de "sentirse útiles en su comunidad" y representa para ellos y sus familias "un aliciente al sentirse motivados".

Villalobos considera que el trabajo que realizan las entidades sociales "tienen, a su vez, un efector multiplicador en la población que también deberían apoyar otras instituciones y empresas privadas".

Por otra parte, las entidades sociales con las que colabora la Diputación han reconocido en diversos momentos que "gran parte de la labor que pueden realizar en la provincia procede de la colaboración aportada por la Diputación año tras año".

La Corporación provincial viene colaborando desde hace muchos años con una serie de entidades sociales que cuentan con jóvenes con discapacidad intelectual que realizan sus prácticas en el ámbito de oficinas. Asimismo, estas entidades trabajan para generar ideas, proyectos y nuevas actitudes para poner en contacto a estas personas tanto con entidades públicas como privadas en función de sus necesidades, asesorar y orientar.

En esa línea la Diputación ha ido renovando acuerdos con este tipo de entidades para la realización de prácticas becadas de jóvenes con discapacidad intelectual. Se trata de realizar labores encaminadas a la formación de carácter práctico como auxiliares de oficina, como las que desempeñan varios chicos en las instalaciones de la Diputación. Estas becas de prácticas las desarrollan también personas con discapacidad mental y sensorial. Son muchas las asociaciones que luchan y apoyan la integración laboral de las personas con discapacidad intelectual ante las distintas administraciones públicas. Algunas de estas entidades trabajan en la formación, investigación y búsqueda de recursos que mejoren la integración social y laboral de las personas con discapacidad intelectual.

Igualmente estudian las tendencias del mercado laboral para formar personas capaces y competitivas, en los distintos ámbitos o sectores, fomentando la concienciación social y la reivindicación de sus derechos.