Bielsa se reinventa

El Loco enloquece el Velodrome. La muy ruidosa llegada de Marcelo Bielsa a Marsella empieza a justificarse y a cobrar visos de éxito rotundo. El Olympique se impuso al Toulouse en la décima jornada de la Ligue 1 y continúa como líder destacado, por delante del multimillonario París Saint Germain y el redivivo Girondins.

El Olympique de Marsella logró su octavo triunfo seguido gracias a los tantos del camerunés Nicolas N'Koulou y del atacante Gignac, que está en vena. Va a gol por partido: 10 en 10 jornadas.

La victoria sobre el Toulouse fue la respuesta del Marsella al claro triunfo del PSG sobre el Lens, en el encuentro adelantado del pasado viernes. Con 25 puntos, el equipo del sur de Francia se coloca con 25 puntos, por los 18 de los parisinos y del Burdeos, que empató con el débil Caen.

Se puede decir que Bielsa está haciendo historia en Marsella, una ciudad apasionada con su equipo que vuelve a vibrar con su trayectoria. Se trata de una racha triunfal, las ocho victorias consecutivas, que tiene apenas dos precedentes. Hubo una racha similar entre enero y abril de 1937, poco antes de que se estrenase en 1938 el Velodrome, y entre septiembre y noviembre de 1998. Y eso que Bielsa no empezó con buen pie.

El singularísimo entrenador de Rosario, que esta misma semana donó dos millones de dólares para ayudar a reflotar al equipo de su alma, el Newell's Old Boys rosarino, está logrando imponer sus avanzados conceptos táctico-técnicos en Marsella. Y eso que a principios de septiembre cargó duramente contra su presidente, el también sin par Vincent Labrune, toda una institución en Marsella, por la política de fichajes. "Creo que el presidente me hizo promesas que sabían que no podían cumplir", dijo a principios de septiembre. "Ninguno de los jugadores que han llegado al Marsella lo ha hecho por iniciativa mía. He propuesto doce opciones, de las cuales ninguna se ha concretado", dijo sobre sus propuestas para fichar a Stambouli o Alderweireld.

Labrune tentó a algunas de sus peticiones, como el sevillista Coke, pero finalmente no realizó ofertas serias para traerle a Bielsa a los futbolistas que había pedido.

Aun así, su Marsella ya tiene un sello propio, el de la presión y el juego combinativo. Ayer se mostró dominador y decidido desde el inicio. Tras el gol de N'Koulou, que cabeceó un centro de Dimitri Payet, una jugada en la que los hombres de Bielsa dieron más de 10 pases fue culminada por Gignac para hacer el 2-0. El vigente campeón, el PSG, que además tiene lesionado del talón de Aquiles a su gran referencia, Ibrahimovic, sabe que tiene competidor serio: el Marsella de Bielsa. En tres jornadas se verán las caras los dos grandes de Francia. El país galo ya vibra.