Tragedia falseada por la impostura
EEUU, 2008, Drama. 101 min. Dirección: John Polson. Intérpretes: Russell Crowe, Jon Foster, Laura Dern. Cines: Al-Ándalus Bormujos, Arcos, Metromar, Nervión.
Se debió decir el guionista Emil Stern cuando dio con la obra El síndrome de la ternura de Robert Cormier (1925-2000): he aquí una historia humana, densa, emocionante y real como la vida misma. Y convirtió en guión la historia de un policía amargado cuya mujer está en coma, de un joven parricida -además de amargado- que está a punto de ser puesto en libertad y de una chica amargada (hija de una madre amargada) de vida errática. El poli amargado está obsesionado con el asesino parricida quien, a su vez, obsesiona a la chica medio desequilibrada que, por serlo, se enamora de él. Un triángulo simpático.
Satisfecho, le dio el guión a John Polson, que ya se había ocupado sin mucha gloria de desequilibrados en Fanática y El escondite. Éste, por no quedarse atrás, se debió decir: empecemos la película con una secuencia de impacto tipo extremeño. Y filmó al encargado de un supermercado poniendo en práctica la campaña El placer está en tus manos mientras la chica turulata le enseña las tetas. A partir de ahí se van trenzando los destinos de los tres amargados que, quién puede dudarlo, terminará en tragedia, más que tragedia, super tragedia… Y tristeza. Todo amenizado por la voz en off del policía recitando los monólogos más retórica, falsa, superficial e impostadamente duros que se hayan oído desde hace mucho tiempo en una pantalla.
La ternura, el dolor, la soledad, la indefensión, el sufrimiento psíquico y físico, la enfermedad o la muerte son realidades demasiado duras y sentimientos demasiado humanos para tomárselos a la ligera fingiendo tomárselos en serio, con lo que la broma se vuelve burla. La realización es tan gratuitamente enfática como los monólogos. Las interpretaciones naufragan en esta tormenta de imposturas.
También te puede interesar
Lo último
La aldaba
Carlos Navarro Antolín
El teleférico, el talismán perdido
Comedia sin título | Crítica de flamenco
Perlas coreográficas del universo lorquiano
La ventana
Luis Carlos Peris
La falta de educación ya como plaga
Tribuna Económica
Joaquín Aurioles
La burbuja inmobiliaria