La eterna juventud de Joaquín

El Betis obtuvo el viernes la primera victoria como local de la temporada gracias a un tanto de Joaquín, que demostró liderazgo cuando más lo necesitaba su equipo para tirar del carro y leer perfectamente lo que requería el partido, en cada momento, para que el Málaga no fuera capaz de arañar, siquiera, un punto. Gustavo Poyet, técnico de los verdiblancos, lo situó en la mediapunta y el portuense se sintió muy a gusto jugando con total libertad, no tan pegado a la banda, y prueba de ello fue el gol que hizo, rematando a la perfección un magnífico centro de Musonda.

Además del tanto, Joaquín se vació en el terreno de juego, no se arrugó y dio la cara siempre en un accidentado partido, pues tras un salto con el malaguista Camacho tuvo que recibir seis puntos de grapa en la cabeza, volviendo al campo con un vendaje y dispuesto a seguir tirando del carro bético. Así, en la segunda mitad, las acciones ofensivas del Betis pasaron por sus botas, aunque el mejor ejemplo de la entrega que puso el portuense fue la carrera que realizó en el minuto 94 para frenar al Chory Castro, muriendo ahí el encuentro con el pitido final de Álvarez Izquierdo. Fue entonces cuando el Benito Villamarín se rindió a su capitán.

Con el del Málaga, Joaquín sumó su partido 430 en Primera División, disputando 293 con el conjunto de Heliópolis, fiel reflejo de una carrera que el de El Puerto de Santa María decidió finalizar la temporada pasada tras regresar al Betis procedente de la Fiorentina. Así, en la campaña pasada, el 17 estuvo muy irregular en su rendimiento, quedándose, incluso, sin jugar varios encuentros con Juan Merino en el banquillo, además de pasar por algunos problemas físicos que le impidieron estar al cien por cien. No obstante, acabó la temporada jugando 30 partidos en Liga (un gol y cinco asistencias) y dos en Copa del Rey.

Además, Joaquín mandó un mensaje muy claro. "Intento ayudar en todo lo posible, no he venido aquí para ir a cuatro peñas ni para contar cuatro chistes. Soy una persona a la que no le preocupa lo que puedan decir, la confianza que tengo en mí mismo es total. Es verdad que puedo dar mucho más, es lo que quiero y sé que la gente me espera con los brazos abiertos", comentó el jugador bético, en los medios oficiales de la entidad verdiblanca, la campaña pasada, cuando no encontraba la regularidad necesaria para brillar, algo que por ahora lo está consiguiendo, demostrando, además, que se encuentra muy bien físicamente.

Precisamente, Gustavo Poyet, técnico del Betis, destacó este aspecto tras el encuentro del pasado viernes: "Estuve a punto de sujetarlo, me faltó poco. Fue una decisión de verlo esta mañana (por el viernes), hablar con él y casi que me convenciese de que estaba fenomenal. No se equivocó. Hay que resaltar también lo de Marcos Álvarez en la parte física. No es lo mismo jugar cuando tienes 20 años que cuando tienes 35 habiendo jugado otro partido hace tres días. El día del Sevilla me decía a los 80 minutos que no podía más, hoy jugó 94. Es importante porque entiende mucho el juego, diría que es quien más lo entiende. Mientras lo tengamos vamos a ponerlo sin perderlo, son decisiones que tengo que tomar, pero espero tomarlas siempre bien".

La felicidad de Joaquín, por el que sus compañeros tienen una gran admiración en el vestuario, volvió a reflejarse ayer, pues mandó en las redes sociales un mensaje de tranquilidad a los aficionados béticos debido al percance que sufrió en la cabeza: "Como veis, estoy bien. ¡Gracias por vuestro cariño! ¡Musho Betis!". Una buena noticia para el Betis que el portuense siga tirando de galones con su fútbol, siendo un ejemplo para los futbolistas más jóvenes de su equipo, como es el caso de Musonda, y querido por los aficionados al fútbol, en general, demostrando que, en estos momentos, vive una eterna juventud.