La ventaja que tiene el Sevilla de saber que algunos futbolistas muy definidos van a salir este verano es que puede buscar con tiempo sus relevos en la plantilla. En el caso de Negredo, desde el primero hasta el último de los sevillistas dan por hecho que su adiós este verano está cantado por las cifras que está moviendo el vallecano en el mercado y la acuciante necesidad de liquidez que tiene la entidad que preside José María del Nido.

Lógicamente, hasta que no se produzca el traspaso y no se haga efectivo, los pasos van a ir con menos aceleración, pero no por ello con menos firmeza. Así, los técnicos del Sevilla llevan tiempo viendo delanteros, Emery ha pedido que no haya muchos experimentos en el tema del gol y ha dado incluso su visto bueno a que los que vengan tengan cierto cartel y garanticen goles, tanto en lo que se refiere al primer espada (el sustituto de Negredo) como en el segundo. En este sentido, los técnicos del Sevilla han seguido con interés la temporada que ha realizado en el Zaragoza Helder Postiga, con unos números excepcionales para un equipo enfrascado en la lucha por el descenso, 13 goles. Aunque la apuesta por Postiga no tendría nada que ver con la venta de Negredo, sino más bien porque Emery no confía en Babá y se resiste a fiarlo todo otra vez a un solo goleador, lo cierto es que el portugués ofrece una competencia de garantías pese a su larga trayectoria y experiencia en el fútbol (tiene 30 años).

El Sevilla ya ha iniciado los primeros contactos con el entorno de Jorge Mendes, cuyo grupo inversor trajo a Postiga al Zaragoza, en teoría a cambio de unos dos millones de euros que se debían de repartir Oporto y Sporting, que compartían la propiedad del futbolista. Pero los negocios de Mendes no son nunca como los que tradicionalmente estamos acostumbrados a ver en el mundo del fútbol y será ahora la pericia de los dirigentes del Sevilla y las buenas relaciones con el afamado representante portugués lo que determinen si acaba siendo factible la operación o no.

Helder Postiga tiene un año más de contrato en el Zaragoza, pero todo es en teoría. En la capital maña se da por seguro desde hace tiempo que el portugués no seguirá la temporada que viene porque el deseo de Mendes es colocarlo mejor. Estuvo muy cerca de ser traspasado a un club ruso en el pasado mercado de invierno, pero el rechazo tajante de Jiménez sirvió de alguna manera para que Agapito Iglesias convenciera a todas las partes para que no se moviera de La Romareda. Ahora es distinto. El futbolista va a salir, Jiménez ya lo ha asumido y sus representantes/inversores ya están moviendo los hilos. Inglaterra, no obstante, va a ser un rival a tener en cuenta porque Mendes cree que, a su edad y con la temporada que ha firmado, es el mejor momento para su llegada a la Premier. El West Ham era uno de los interesados.

Lo que sí puede ser decisivo es que el Sevilla entre al final en competición europea, una de las premisas que Postiga quiere para su próximo destino. El precio y las condiciones de pago no serían del todo un gran problema para la entidad que preside Del Nido, ya que fórmulas similares a las empleadas con Doyen (incluso se rumorea de que sigue habiendo conexiones entre ambos grupos) pueden acercar a este internacional luso, que no deja de ser una opción. Los técnicos lo han seguido y entra en los cálculos.