El precio de los peajes de las autopistas que dependen del Estado suben un 7,5% tras la supresión de la compensación que el Gobierno hasta ahora proporcionaba a las concesionarias, que repercutirán la medida a los clientes. Fuentes del Ministerio de Fomento han explicado que el pasado sábado se remitió una orden ministerial a las empresas concesionarias indicando los nuevos peajes máximos autorizados.

En concreto, el real decreto ley de medidas urgentes para garantizar la estabilidad presupuestaria suprime la compensación del 7% a las concesionarias por la pérdida de ingresos derivada de una bajada equivalente en las tarifas, recogida en el artículo 8 del real decreto ley 6/1999. Las mismas fuentes de Fomento señalan que son las empresas concesionarias las que deben decidir ahora si asumen ese nuevo margen.

Fuentes de estas empresas han indicado que la medida afecta a todas las concesionarias, que "no podrán imponer de nuevo las bonificaciones y gratuidades que se impusieron en su día a cuenta de ese 7%". Además, afirman que la entrada en vigor de la subida del IVA, prevista para el 1 de septiembre, provocará otro aumento de los precios, que sumado al de este fin de semana llegaría al 10%.

El portavoz del PSC en el Parlament, Jaume Collboni, ha reclamado que las concesionarias de autopistas de peaje "aporten su parte" para que el incremento de precio no recaiga únicamente en los usuarios. En una entrevista a Cataluña Información, Collboni ha pedido al Govern que "sea fuerte" en la negociación con las concesionarias para que se hagan corresponsables de la situación. Además, ha recordado que CiU ya subió peajes un siete por ciento en Navidad "sin consenso de usuarios ni políticos", por lo que cree que actuaron de la misma manera que el Gobierno central con la subida del 7,5 por ciento de la AP-7 y la AP-2 que ahora critica.

Preguntado por la posibilidad de que Cataluña se acoja al fondo de liquidez de las autonomías, ha explicado que el PSC "evidentemente" apoyaría esta decisión, aunque ha alertado de las condiciones políticas: "No apoyaremos unas condiciones que puedan limitar el autogobierno de la Generalitat", ha advertido. El portavoz socialista ha augurado que el Gobierno central tendrá una actitud "reticente o negativa" respecto a la propuesta de pacto fiscal aprobada este miércoles en el Parlament, ya que no tiene al apoyo del PSC. "La respuesta del Gobierno sería más moderada si los socialistas estuvieras incluidos", ha reiterado Collboni, para quien la división de los partidos catalanes en este aspecto es una mala noticia para la imagen de la comunidad.

Además, ha recordado que el PSC no apoya el concierto económico sino un modelo federal "de corresponsabilidad fiscal", y ha tachado de arcaico el sistema de financiación del País Vasco y Navarra. Preguntado sobre las posibles medidas que tome el partido contra el diputado Ernest Maragall por saltarse la disciplina de voto en este tema, ha asegurado que aún no han decidido qué harán. Collboni ha añadido que no hay precedentes de esta actitud, y ha afeado que Maragall se desmarcara del partido tras un debate interno que había derivado en "una apuesta consensuada".