Fútbol | Liga de Campeones
Un error de Gazzaniga amarga el debut europeo del Girona en el minuto 90 (1-0)
Fernando Verdasco se despidió del torneo de Wimbledon tras caer ante Bernard Tomic por 6-4, 3-6, 3-6, 6-3 y 6-4, en un encuentro que comenzó el martes y que ayer se completó tras casi cinco horas de espera a causa de la lluvia.
La primera suspensión del duelo dejó un marcador muy igualado: 6-4, 3-6, 3-6, 6-3 y servicio para el español. Tras un retraso de 50 minutos por la lluvia, al mediodía jugaron 36 minutos más. Después, el partido volvió a quedar suspendido, justo cuando Verdasco servía con 3-5 en el último set.
La reanudación se produjo casi cinco horas después, cuando el madrileño ganó su servicio. Sin embargo, el australiano disponía de su servicio para apuntarse la victoria y no falló.
Lo cierto es que el mal tiempo afectó a toda la programación de la jornada hasta el punto de que la organización informó de la cancelación de algunos partidos en segundo turno y todos los correspondientes a los últimos dos turnos. Así, dos españoles se quedaron sin jugar en el cuadro masculino: David Ferrer, que se verá las caras cuando el tiempo lo permita con Nicolas Mahut; y Nicolás Almagro, rival de Denis Istomin.
Un tanto de lo mismo sucedió en el cuadro femenino, pues Garbiñe Muguruza, número dos del mundo, no pudo enfrentarse a Jana Cepelova. Tampoco pudieron jugar Carla Suárez, rival de Denisa Allertova, ni Laura Arruabarrena, que debía medirse ante Daria Kasatkina.
Mucho mejor le fueron las cosas a Novak Djokovic, quien sumó su trigésima victoria seguida en un Grand Slam al imponerse a Adrian Mannarino por 6-4, 6-3 y 7-6 (5).
De esta forma, el serbio se acerca a las rachas consecutivas de Rod Laver y Donald Budge. Ambos son los únicos jugadores que lograron ganar los cuatro grandes en una misma temporada. Laver lo hizo en dos ocasiones, 1962 y 1969, y Budge en 1938. Además, el primero logró 37 triunfos seguidos en su carrera, por 31 del segundo. Así pues, si Djokovic ganar su próximo partido, daría caza a Laver.
Después de la victoria de Agnieszka Radwanska, tercera favorita y finalista en 2012, ante Kateryna Kozlova (6-2 y 6-1), Djokovic y Mannarino saltaron a la pista central.
El francés jugó el primer set casi de forma primorosa, aguantando su servicio hasta el décimo juego y utilizando su dejada para mantener la tensión hasta el final de ese parcial. A continuación, Djokovic se lanzó en picado y ya no tuvo rival hasta el final, cuando Mannarino logró romperle su saque y forzar el desempate.
En ese juego corto, el balcánico sentenció a la segunda oportunidad para acabar el partido en dos horas y cinco minutos.
También cumplió con los pronósticos Roger Federer, que no tuvo compasión de Marcus Willis, 772 del mundo, al que doblegó por 6-0, 6-3 y 6-4.
El suizo, que nunca ha perdido un partido contra un jugador de tan bajo ranking, se tomó el encuentro con tranquilidad y aceptó de buen grado los cánticos que los seguidores británicos dedicaron a Willis, quien necesitó siete juegos seguidos para alzar los brazos como si hubiera ganado el partido. Pero sólo había conseguido anotarse por primera vez su servicio.
También te puede interesar
Fútbol | Liga de Campeones
Un error de Gazzaniga amarga el debut europeo del Girona en el minuto 90 (1-0)