La amenaza del ariete mentiroso

ÚLTIMO ensayo anterior a la lista definitiva de cara a la Eurocopa y va a realizarse ante una selección emergente, ante un rival que nunca significó nada en el universo futbolístico y que está tomando relevancia. Venezuela al aparato, hoy más conocida como La Vinotinto por el color de su zamarra y que ha adquirido notoriedad hasta convertirse en rival incómodo, muy acorde a lo que se pretende en esta noche malagueña. Es Venezuela un sparring idóneo que no es ya el punching ball de antaño y, lo que resulta más elocuente, ya país exportador de futbolistas, como bien sabemos en este fútbol nuestro.

Una noticia desagradable está poniéndole sordina a la que capitalizó el foco desde el momento que Del Bosque anunció la convocatoria. La desagradable gira en torno a la musculatura de Negredo, algo que no debe ser decisivo en el futuro del madrileño, pero que no cabe la menor duda de que llega en un momento de lo más inoportuno. Y es que cuando un goleador anda a la caza y captura de esos goles que son para él como el aire se lesiona, nunca se sabe si la siguiente oportunidad llegará a tiempo de conseguir lo soñado. Lo soñado para Negredo es estar en la Eurocopa, se sabe que es algo que le quita el sueño y una lesión a estas alturas debe preocuparle.

La otra noticia, la que focalizó la actualidad de La Roja, es la ausencia de Fernando Torres por vez primera sin mediar lesión alguna. Y se ha esgrimido hasta la saciedad que gracias a un gol suyo vino la Eurocopa a nuestras vitrinas, pero es que el actual no se parece en nada al de aquella tarde en el Prater. Sin duda se trata de la travesía de un bache sin más que se agrava por lo mismo que en el caso de Negredo, por la falta de goles. Pero tanto uno como otro se reconciliarán con los goles más pronto que tarde y ambos contarán de nuevo para el seleccionador... siempre y cuando no cale eso del ariete mentiroso que se está poniendo tan de moda en el fútbol contemporáneo.