Un nuevo estudio elaborado por el Observatorio Argos de la Junta sobre los sectores económicos emergentes revela que en Sevilla los más extendidos por el territorio siguen ligados a los recursos tradicionales de cada zona, que recobran fuerza por el prestigio de la materia prima o por un nuevo enfoque de la actividad. Así, en las nueve áreas territoriales de empleo en las que se divide Sevilla (dos para la capital, el resto para los pueblos) la agricultura es la que tiene mayor presencia como sector emergente, en su modalidad tradicional, con la agricultura ecológica o a través de la industria agroalimentaria. Como novedad, crece también la viticultura.

Y son destacables por estar también presentes en muchos territorios, las energías renovables, la atención social, los servicios a empresas, culturales y de ocio, el micoremprendimiento y las actividades sanitarias. Es una constante, además, el turismo, por el tirón de la ciudad y porque las nuevas modalidades -activo, gastronómico, cultural...- están abriendo nichos de mercado. En lo que respecta a otros sectores, como comercio electrónico, logística o las nuevas tecnologías, están en auge pero por el tirón de grandes núcleos. El único tipo de construcción con proyección todavía en la provincia es la "especializada" (pilotes, cimentación, estructuras, andamios y cubiertas) y que se concentra en el área metropolitana.

El estudio está elaborado con datos muy actuales, del segundo trimestre de 2016, recogidos en oficinas y centros territoriales de empleo de la Junta. Se definen 26 sectores emergentes, que son aquellas actividades que presentan una evolución positiva y que se espera que sigan creciendo en el futuro. El análisis confirma una importante brecha entre territorios, sobre todo con la Sierra Sur. De los 26 sectores emergentes analizados, poco más de diez tienen presencia en ella, la mitad que en el resto, y muestran una economía menos diversificada. Ocurre también en parte con la zona de los Alcores-Écija.

Entrando en el desglose de los sectores emergentes, la agricultura tradicional lo es en toda Sevilla, salvo en la capital. En otros estudios no despuntaban comarcas como la Sierra Sur, Aljarafe-Marismas y Bajo Guadalquivir, pero sí lo hacen ahora. En el Bajo Guadalquivir, el auge se vincula a la producción de quinoa en la zona de Los Palacios. La demanda de productos ecológicos hace que este tipo de cultivo vaya al alza. Pero es llamativo que la agricultura ecológica no destaque como sector emergente en la Sierra Sur y en la zona de los Alcores-Écija, cuando sí lo hace en la capital y en el 40% de los municipios andaluces, aunque Sevilla está lejos de otras provincias. La ganadería es emergente en la Vega-Sierra Norte, el Bajo Guadalquivir-Sevilla (aunque no presenta buena evolución), en el área Aljarafe-Dos Hermanas y en el Aljarafe-Marismas, donde tiene la evolución más positiva. La acuicultura entra con fuerza en Dos Hermanas y Sevilla.

En la lista de sectores vinculados al territorio destaca como novedad la viticultura, al alza incluso en la capital. En las comarcas del Aljarafe, en donde históricamente tuvo presencia, se mantiene y se estrena incluso como sector el turismo enológico. La viticultura cobra peso además en Sierra Sur y Vega-Sierra Norte. En cuanto a la industria agroalimentaria, la Sierra Sur es el único territorio sin buen resultado pese a que es "el sector industrial más importante de Andalucía", al actuar de motor de la economía rural. Esta industria sí va bien en otras áreas, está "en apogeo" en la capital y mejora en Dos Hermanas, cuando en el aterior estudio retrocedía.

Con respecto a otras actividades extendidas, destacan las energías renovables, que, a pesar de la tesitura de Abengoa, prosigue su crecimiento, salvo en la Sierra Sur. Ésta es la única zona en la que tampoco van bien los servicios a empresas. En este aspecto (servicios de contabilidad, publicidad, dinaminación por redes sociales, defensa jurídica, limpieza...) destacan Alcalá de Guadaíra y Mairena del Aljarafe y la capital, aunque crece más en la zona Norte (engloba a oficinas de empleo de Sevilla Este, Macarena, el Centro y Cruz Roja), que la Sur (Amate, Huerta de la Salud, Luis Montoto, Triana-Los Remedios). La Sierra Sur se queda fuera también del sector de la logística, que destaca en el resto por el tirón de grandes municipios (tiene buenas perspectivas en la capital, crece en Alcalá de Guadaíra y Morón). También se queda fuera la Sierra Sur del boom de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, donde destaca la capital. Sobre la I+D+I, se dice que destaca la capital junto a otros grandes núcleos, como Alcalá de Guadaíra, y se ha detectado como novedad en Bormujos y La Rinconada. Sigue evolucionando positivamente la atención social, que sólo presenta dificultades en Los Alcores-Écija. En otros municipios ha pasado de estar en retroceso a crecer de nuevo. Otro sector en auge muy extendido son los servicios culturales y de ocio (la hostelería, el deporte, centros comerciales, servicios personales, patrimonio cultural y folclórico) del que sólo se descuelga la comarca de Los Alcores-Écija, pese a que sí sobresale en el sector del turismo cultural.

Dentro de este apartado de "nuevo turismo" destacan las áreas de empleo del Aljarafe-Marismas, Bajo Guadalquivir, Campiña-Alcalá, Sierra Sur y Vega Sierra Norte en turismo rural y en turismo activo, que crece incluso en la capital. Ésta empieza a destacar además en turismo gastronómico, junto al Aljarafe, el Bajo Guadalquivir, la Sierra Sur y la Vega-Sierra Norte. El estudio subraya este tipo de negocio en localidades como Gelves, Palomares, San Juan, El Cuervo y Castilblanco. En el Aljarafe y la marisma, crece el turismo ornitológico en Aznalcázar, Isla Mayor, La Puebla del Río, Sanlúcar la Mayor y Villamanrique de la Condesa. En la Sierra Norte destaca el turismo cinegético, novedoso como sector emergente en municipios como Guadalcanal, Villanueva del Río y Minas y Castilblanco. Por otro lado, es significativo que el turismo de congresos, que sí está en auge en otras capitales andaluzas, no destaque en Sevilla, pese a las posibilidades tras la ampliación del Palacio de Congresos. La capital tampoco destaca en turismo deportivo pero sí aumenta el turismo de cruceros.

Durante la crisis, muchos han apuntado al comercio electrónico y al comercio exterior como alternativas para salir de la misma y estos sectores, efectivamente, son emergentes en todos los territorios de Sevilla, sobre todo en los municipios mayores que los integran, con dos excepciones: de nuevo la Sierra Sur y los Alcores-Écija. Ambos están también en crecimiento en la capital, donde está igualmente en expansión la biotecnología. El sector de la aeronáutica sigue en crecimiento en el entorno de la capital y La Rinconada y hay buenas perspectivas en muchos territorios también para la industria audiovisiual.