Una operación con todas las bendiciones patrimoniales y que implica una mudanza provisional y, posteriormente, una con carácter definitivo. Las oficinas del Banco Santander de la Avenida de la Constitución cerrarán unos meses para ser objeto de obras de reforma con el objetivo de modernizar las instalaciones y renovar el concepto de atención al cliente al estilo que ya se ha puesto en marcha en otras sedes de la entidad. El edificio, ubicado en el conjunto histórico declarado de la ciudad, está catalogado y, por lo tanto, la reforma planteada por el arquitecto Manuel López García ha tenido que pasar los controles preceptivos. Durante la obra, cuyo comienzo es inminente, los trabajadores de estas oficinas de la Avenida pasarán de forma provisional a operar en las del edificio próximo de la calle Joaquín Guichot (antiguo Banesto). Una vez que termine la obra de la sede de la Avenida, todos los servicios de Joaquín Guichot -donde el Santander está como alquilado- pasarán a la sede ya reformada, por lo que la entidad bancaria dejará de operar en el edificio de La Unión y el Fénix. El edificio tiene asignado en el vigente PGOU la protección parcial en grado primero. Formalmente, la promotora ha solicitado obra para "reforma menor para la adecuación interior de local desarrollado en las plantas sótano, baja y entreplantra de edificio existente, mateniendo su uso pormenorizado de oficina con acceso de público en planta baja y entraplanta, pero modificando sustancialmente la actividad inmplantada de banca y servicios financieros con servicio público".

El edificio está catalogado en el PGOU y será adaptada como 'oficina inteligente'

La nueva oficina de la Avenida se dividirá espacialmente en dos zonas, según el concepto de oficina smart red por el que ahora apuesta el banco. En Sevilla capital y provincia hay una veintena de oficinas que están asumiendo este modelo. El proceso es paulatino porque, en algunos casos, la reforma para convertirlas en 2.0 es compleja y se emplean alrededor de cuatro meses en su ejecución. En Sevilla ya hay varias funcionando con estas características, caso de la Campana y la Gran Plaza. La primera zona será de atención al público, dónde se ubica el patio de operaciones y el despacho de dirección. La segunda zona es privada y en ella se ubicará el archivo y cuarto técnico.

PINCHE SOBRE LA IMAGEN PARA AMPLIAR./FUENTE: Banco Santander. GRÁFICO: Dpto. de Infografía

El proyecto presentado por el promotor de la obra de reforma de la sede de la Avenida, aprobado por Urbanismo el pasado febrero, incluye una descripción de los diversos espacios. La fachada será lo más abierta posible, con la máxima transparencia para ser comercialmente atractiva. Habrá una zona de autoservicio, donde en primer término estará el acceso a la oficina. Constituye un pórtico o umbral de paso formalizado con el color rojo corporativo que incluye el panel de bienvenida y el equipamiento de autoservicio de la oficina (cajeros automáticos y puesto de internet para clientes). Está previsto el denominado patio público de operaciones, consistente en un espacio abierto al público donde se desarrolla la actividad comercial principal. En ella se incluyen los siguientes elementos de mobiliario: sillones en zona de espera con mobiliario específico y pantalla de audiovisuales, el denominado punto de atención ágil, orientado hacia el acceso, puntos de captación de clientes, mesas altas de atención de pie, módulos de consulta personalizada, de atención al cliente particularizada con sillas para empleado y cliente, y una sala de reuniones con acceso desde el patio público. El cerramiento con la zona pública se materializa con una mampara de vidrio que permite el contacto visual entre ambas zonas de la oficina.

El Santander ha estado hasta ahora como alquilado en el edificio de la Unión y el Fénix

El denominado back office tiene acceso desde el patio público. Incluye los puestos de trabajo para los empleados con mobiliario específico para las gestiones de caja y archivo. Esta estancia es totalmente privada, sólo pueden acceder los empleados y el personal de mantenimiento contratado. Al archivo y al equipamiento técnico se tiene acceso desde el back office. Contendrá en su interior el cuadro eléctrico, etcétera. En los archivos se guardará la documentación que, por ley, la oficina está obligada a mantener durante el tiempo establecido. Así mismo alberga la caja fuerte. Estas estancias son totalmente privadas, sólo pueden acceder los empleados y el personal de mantenimiento contratado.