Un vecino denuncia la ilegalidad de la desratización en Los Perdigones

No se han usado las estaciones raticidas debidas

El Zoosanitario alega que actuó bien

Bolas de espuma de foam esparcidas por el parque cubren la madriguera donde se ha echado veneno
Bolas de espuma de foam esparcidas por el parque cubren la madriguera donde se ha echado veneno / Juan Carlos Vázquez
A. S. Ameneiro

16 de enero 2018 - 06:55

Un vecino del centro, habitual usuario del Parque de los Perdigones y técnico agrario de profesión, que prefiere guardar el anonimato, denunció este lunes en la Policía Local de la Macarena el procedimiento de desratización empleado en esta zona verde por parte del Zoosanitario municipal porque "no se han usado las estaciones rodenticidas fijas como señala el decreto de la Junta que reglamenta el uso de veneno en espacios abiertos".

En efecto, este decreto 8/1995, de 24 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Desinfección, Desinsectación y Desratización Sanitarias indica en su artículo 10 la necesidad de usar "estaciones permanentes de cebos rodenticidas" y que "la colocación de cebos rodenticidas debe hacerse de manera que queden fuera del alcance de los niños, y tomando las precauciones posibles para que tampoco puedan acceder a ellos los animales domésticos y otra fauna distinta de las especies diana".

Estación raticida reglamentaria que debería usarse.
Estación raticida reglamentaria que debería usarse. / fotos: juan carlos vázquez

El parque se cerró el viernes durante varios días para su desratización con veneno anticoagulante. El denunciante asegura que ayer por la tarde técnicos del Seprona, procedentes de Lebrija, se personaron sobre las 18:30 en esta zona verde y ratificaron que "la única manera reglamentaria de proceder con el veneno en lugares a cielo abierto es con el uso de estaciones rodenticidas por razones de seguridad". Y añade que tras poner la denuncia en la Policía se le ofreció que los Bomberos visiten la zona para hacer un informe.

La presencia de espuma de foam de color amarillo esparcida por la superficie del parque no es el veneno. Según la versión dada por los técnicos del zoosanitario al Ayuntamiento, ésta se usa para tapar el agujero de las madrigueras donde se ha echado el veneno. "El veneno está dentro de las madrigueras y oculto bajo esa especie de tapón de foam, y esas bolas están enganchadas en las madrigueras", insistió ayer un portavoz municipal, quien explicó que así se hace en las zonas verdes que se desratizan, como Amate y otros puntos. Según el Ayuntamiento, los técnicos del Zoosanitario aseguran al Consistorio que cumplen con la reglamentación andaluza.

Pese a estar cerrada la zona verde, el denunciante se encontró el sábado por la mañana en su interior sobre las 11:30 a un grupo de niños jugando. Se habían colado por una abertura de la reja forzada por vándalos. Tras pedir a los niños que se marcharan y advertir de la situación a un agente local, el Consistorio cerró la abertura con una cinta plástica y alambres.

Otro parque cerrado para "prevenir la aparición de ratas" es el Luis Manuel Olivencia, ubicado en el Distrito Sur. El cierre comenzó la noche del lunes y se prolongará hasta el 22 de enero, "para evitar riesgos sobre personas y mascotas por posible exposición a rodenticidas".

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