Un amigo del presunto autor del crimen de Palomares del Río contó en un chat de Instagram cómo se produjo el asesinato. Este testigo responde a una publicación con su imagen que circuló por las stories de esta red social, en la que se le incrimina como uno de los asesinos. En la charla, admite que él es el dueño de la barra extensible con la que presuntamente fue golpeada la víctima, Jesús R. J., de 18 años, quien fue apaleado y apuñalado en la puerta de su casa la noche de Halloween. La conversación por el chat fue grabada en vídeo y difundida a través de WhatsApp entre los jóvenes de Palomares y Coria del Río.

La Guardia Civil detuvo horas después del asesinato a un menor de 16 años, vecino de Coria del Río y con numerosos antecedentes, como presunto autor del mismo. La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones, pues se sabe que el sospechoso iba con al menos cuatro amigos esa noche y que coincidió con la víctima en un parque cercano a su domicilio.

Conforme avanza la investigación del caso, se consolida la hipótesis de que el crimen fue obra de una pandilla que salió de cacería esa noche, que estaba provocando altercados en el parque y que abordó a la víctima cuando regresaba a su casa en solitario.

El joven que cuenta el crimen en Instagram asegura que el asesino es el menor detenido y que "por eso lo han arrestado", mientras que a él no le han "hecho nada". El amigo del menor responde en el chat a una persona que le pide explicaciones y le reprocha lo que le "hicieron a un chaval que iba para su casa y joderle la vida a su familia", y que le insiste en que "es mejor" que no salga de su casa". "Dime lo que le hicisteis", le pregunta en varias ocasiones el interlocutor. 

El testigo responde que él no tuvo ninguna responsabilidad en el crimen, y que precisamente venía de declarar ante la Guardia Civil. Cuenta quiénes son los cinco jóvenes que habían salido esa noche, la mayoría de ellos menores de edad. El menor "cogió la extensible que tenía yo y le pegó, el chaval se defendió", para acto seguido decir que él se marchó de allí con otro de los miembros del grupo. 

"¿Y por qué le pegasteis?", le pregunta la persona con la que habla. "Le pegó él", responde el testigo, dejando claro que él no participó en la agresión. "No lo sé, pregúntaselo a él", contesta ante la insistencia de su interlocutor.