No titubeó Joaquín Caparrós al admitir que el Sevilla no estuvo bien en Montilivi, donde cayó a manos del Girona. “No ha sido un buen partido en cuanto a juego”, decía el técnico utrerano. La derrota resta a los hispalenses opciones de jugar la Liga de Campeones la próxima temporada. “Hemos perdido una oportunidad importante”, comentó Caparrós.

A los ojos del entrenador, fue un encuentro disputado en el que “cualquier mínimo detalle” podía marcar la diferencia. “Vivíamos más en la ansiedad, más por las disputas por la pelota que por el juego”, argumentaba. “Ellos han tenido fortuna en la acción del gol y luego ha sido difícil para nosotros hilvanar jugadas”.

“Sabíamos que iba a ser un partido difícil. Los dos equipos estábamos necesitados, cada uno con objetivos distintos”, decía Caparrós, quien reconoció que el no haber puntuado en Gerona es un varapalo importante. “Hemos perdido una oportunidad importante y no nos queda más remedio que pensar en el siguiente partido”, dijo señalando al envite del viernes ante el Leganés.

El de Utrera evitó pronunciarse al respecto de la expulsión de Éver Banega, que vio la roja en el tiempo de prolongación en una acción muy precipitada. “Lo perdemos para el próximo partido, pero es un tema que ya hablaremos nosotros”, expresó.