El Balonmano Solúcar volvió a demostrar su solidez en el retorno de la Primera División Nacional Femenina. El cuadro sanluqueño se imponía por un claro 30-21 al Club Balonmano Estudiantes de Ceuta en un partido que se resolvió en el primer tiempo con un contundente 23-11.

Las sevillanas, que llevaban mucho tiempo sin jugar por la interrupción navideña y los descansos ligueros, iniciaban la segunda vuelta ante un rival incómodo y que se había reforzado con el fichaje de la jugadora argentina Aymara Micaela Roldán.

Sin embargo, el BM Solúcar salió con un alto nivel de concentración para encarar el partido y realizó un magnífico primer tiempo, como demuestra el marcador al final del mismo 23-11.

Las sanluqueñas estaban muy bien en defensa, donde las ayudas no permitían la continuidad del juego ofensivo de las ceutíes y que además permitía salir al contraataque con algunos robos del balón que finalizaban en la portería contraria.

En ataque, el Balonmano Solúcar conseguía superar la defensa de las norteafricanas con acciones individuales y también con buenas combinaciones colectivas de las jugadoras locales.

En el segundo tiempo ya se bajó el nivel, quizás por relajación y también por los cambios de jugadoras menos habituales, ya que la diferencia en el marcador se lo permitía al BM Solúcar. También influyó la dureza empleada por el equipo ceutí.

Acta del partido

Pero al final la victoria sanluqueña sirve para seguir sumando y acercar el objetivo de acabar en cabeza esta primera fase del campeonato.

Clara Robayo, una vez más, volvía a protagonizar una nueva exhibición goleadora al totalizar 12 tantos al finalizar los 60 minutos. La secundaba también Mari José Martínez, que se iba a siete goles, mientras que Anna Rojas aportaba tres. Ana Jiménez y María Moncada figuraban en el acta con dos goles, mientras que María Pallarés, Mercedes Ramírez, Lucía Muñoz y Claudia Bermúdez también anotaban un tanto cada una.