Siempre es bueno empezar ganando, aunque sea en pretemporada. El Betis Energía Plus echó a andar con triunfo en la I Copa LEB FAB ante el Morón en un encuentro muy igualado que sólo se rompió cuando los verdiblancos decidieron fajarse, de verdad, en defensa. Además, las primeras sensaciones que dejaron tanto Dee, un auténtico pistolero desde la línea de triple con un 5/9 y 21 puntos –en la segunda parte–, como el tiro de Malmanis y la fuerza de Enechionyia, son bastante positivas y elevan la ilusión de los aficionados a la canasta de la ciudad.

Evidentemente, pocas conclusiones se pueden sacar a estas alturas de preparación de ambos equipos. En el caso del Morón, la plantilla todavía no está completa, faltan algunos jugadores por llevar y los de Pedro Carrión apenas llevan unos días en el puesto. Algo parecido ocurre con los béticos, que comenzaron hace dos semanas con una plantilla completamente nueva. Además, en el pabellón Alameda faltaron jugadores que están llamados a elevar el nivel, como Tunde, enfermo, o Marcius, si finalmente logra recuperarse y formar parte del roster definitivo.

Al equipo de Curro Segura le costó entrar al partido. Sobre todo, en faceta defensiva. El Morón convirtió el pick and roll en su principal arma ofensiva e hicieron un auténtico destrozo en la zona bética. No fue hasta el tercer cuarto cuando los béticos de verdad apretaron atrás, se colocaron el mono de trabajo, y evitaron que los locales encontraran canastas fáciles, que lo llevaron a estar por delante en la primera mitad (41-36).

Fue a falta de 3:15 para el final del tercer cuarto cuando los de verde se pusieron al fin por delante en el marcador. Dee, con una entrada a canasta acompañada con una falta, colocaba el 52-53 en el marcador. El norteamericano fallaba desde el tiro libre el adicional, pero el rebote cayó a Malmanis, que amplió la renta con otros dos tiros libres. Desde ese momento, los béticos se mantuvieron al frente en el marcador y encararon por delante el inicio del último cuarto (56-65).

Guiados por Lluis Costa y Dee, los béticos pusieron la máxima diferencia en el luminoso (60-76, minuto 34). Pese a que el encuentro parecía completamente encarrilado, el Morón apretó en el último tramo de partido para reducir distancia y, por qué no, intentar dar la sorpresa. El Betis puso de su parte, puesto que fue incapaz de ver el aro y un parcial de 16-3 apretó el marcador a falta de poco más de un minuto para terminar. El marcador, 75-77.

Cuando palpaba la posibilidad de la igualada, un inoportuno resbalón de Alejandro Rodríguez dio luz verde a los béticos para sentenciar. Un carrusel de tiros libres finales dejó el marcador final en 77-83.