El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, advirtió ayer que un boicot a los productos catalanes tendría un efecto bumerán con consecuencias en Andalucía y en el resto de comunidades.

Amor mostró la "preocupación" que sienten muchos autónomos andaluces y de otras comunidades que son proveedores para productos catalanes ante esta iniciativa. "Mucha de la materia prima de los productos etiquetados como catalanes o incluso el producto elaborado proviene de Andalucía y del resto de comunidades", subrayó. "Cuando se realiza un boicot a productos con etiquetado de Cataluña, también se está boicoteando empresas, autónomos de Andalucía y de otras comunidad que prestan servicios a esa empresa", dijo Amor, quien consideró que esta situación es "un flaco favor".

Además, el presidente de ATA avisó de que "no todas las empresas ni todos los autónomos que realizan su trabajo en Cataluña son independentistas" y alertó de que el daño puede ser "terrible".

No obstante, también señaló que ese boicot que algunos han instado por redes sociales no se está produciendo y resaltó que cuando alguien insta a hacer boicot debe pensar las consecuencias que tiene.

Asimismo, afirmó que por ejemplo si se hiciera boicot a alguna empresa de bollería "no se puede olvidar que esa empresa tiene fábrica en Puente Genil (Córdoba) o Sevilla, o que tiene 300 autónomos repartiendo todos los días esos dulces desde las 05:00 por todo el territorio de Andalucía".

Paralelamente, Amor pidió al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que "pare esta carrera que sólo lleva a pegar un tortazo a la sociedad catalana y española".