El Fiscal

Noche de reyes magos y... ¡nueva hermana macarena!

  • De una copa exquisita y mesurada de público nació la flor de una nueva macarena y muchas más cosas...

Mercedes Morón Laguillo y Rocío Cruzado Candau, con la solicitud de hermana de la Macarena

Mercedes Morón Laguillo y Rocío Cruzado Candau, con la solicitud de hermana de la Macarena / M. G. (Sevilla)

Qué tres reyes magos más cofrades tenemos este año en la cabalgata del Ateneo que preside don Emilio Boja. Luis Bolaños (Melchor) tiene sangre cachorrista y es de la Sagrada Lanzada. Pídanles un día que les cuente cómo se hizo hermano de la cofradía de San Martín, en cuya plaza vive y tiene las mejores vistas para contemplar la salida de la cofradía. José María Pacheco (Gaspar) es muy, muy, muy baratillero, y en estas páginas dimos cuenta de su jura como hermano de la cofradía del Arenal, su barrio de siempre. Pacheco ha llevado a altas personalidades del Estado a ver su cofradía. Y Alejandro Marchena es de la cofradía más hermosa, la Amargura, y hasta hace pocos días fue el tesorero del Consejo, el que siempre hace de malo de la película. El tesorero que no es malo ni es tesorero ni es ná. Es hora de que haga de bueno... y el papel es insuperable: el rey negro.

Por todo, el acto de proclamación de los reyes magos tenía un marcado color morado, un incuestionable acento capillita. Y en la copa posterior, que convocaron los tres reyes, se produjo uno de esos hechos de los que las circunstancias te ponen de testigo: la esposa de Bolaños, Rocío Cruzado Candau, muy vinculada al Amor como comprenderán por su segundo apellido, firmó su solicitud de hermana de la Macarena, presentada por Mercedes Morón Laguillo y el mayordomo de la Esperanza, Enrique Espinosa de los Monteros. Y si de una boda sale otra, de una copa de reyes magos brota una nueva hermana de la cofradía elegante por popular, grande por la fuerza de la Virgen de la Esperanza y volcada en mejorar la sociedad por el empuje de sus hermanos. Todo eso ocurrió en una velada animada, pero sin bullas, una cita mesurada, exquisita y con las medidas que nunca se deberían perder.

Joaquín Moeckel, Manuel Marchena y José María Pacheco. Joaquín Moeckel, Manuel Marchena y José María Pacheco.

Joaquín Moeckel, Manuel Marchena y José María Pacheco. / M. G. (Sevilla)

Allí andaban en armonía el alcalde Antonio Muñoz, el teniente Cabrera, el doctor Fernando Fabiani, Manuel Sainz, el catedrático Manuel Marchena, el presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido, con su mujer Fina Sáez; Juan Ignacio Zafra, director territorial de Caixa Andalucía; Iván Bohórquez, para muchos siempre un entrañable hermano de la Redención; los abogados Joaquín Moeckel, Ricardo Astorga, Luis Miguel Martín Rubio y José Manuel García Quílez, el empresario Pedro Robles, Juan Pérez de Guzmán, José Cobo, Álvaro Ybarra, Pedro Lissén, el senador José Luis Sanz, Juan de la Rosa y el sacerdote Antonio Romero, entre otros.