El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, advirtió ayer que el 9 de marzo está en juego apostar por el futuro o por el pasado, volver a "la España de antes" que quiere la derecha o apoyar los derechos de los ciudadanos que ha impulsado su Ejecutivo. Zapatero hizo esta reflexión en el acto organizado por el PSC en Hospitalet de Llobregat, el único de la precampaña y la campaña socialista en el que se prevé que coincida con el ex presidente del Gobierno Felipe González, y en el que subrayó que España no se ha roto y "a lo mejor, lo que se rompe es el PP" el 9 de marzo.

A González le dedicó la "amplia victoria" que se mostró convencido de lograr en una fecha en la que, según Zapatero, los españoles han de decidir entre "la España de antes" que defienden dirigentes del PP como Miguel Arias Cañete, o un Gobierno socialista que apueste por los derechos y por el futuro. "Se decide el futuro o el pasado, o las derechas o los derechos de los ciudadanos; se decide -insistió- entre un Gobierno que da la cara y aquéllos que siempre se escondieron".

Posteriormente, durante una comida en Lérida con unos 2.200 militantes y simpatizantes del PSC, Zapatero afirmó que necesita una "victoria amplia" en Cataluña para frenar al PP y subrayó que CiU no se define entre un PSOE que ha apoyado a Cataluña y un PP que ha ido "en contra" de los intereses y la identidad de los catalanes.

"Hay algunos partidos que dicen que van a esperar a después del 9 de marzo para ver si apoyan a Mariano Rajoy o a mí, y yo les digo a los ciudadanos de Cataluña y de Lérida que no pueden esperar a después del 9 de marzo, sino que elijan directamente", apuntó Zapatero, que defendió su proyecto progresista y "de vanguardia".