El mal trago de Miley Cyrus

Está claro que Miley Cyrus no quiere seguir siendo una niña. La ex chica Disney ha visitado recientemente España para la celebración de los MTV EMA 2010, y su paso por este país no ha pasado inadvertido. La adolescente empezó llamando la atención en el photocall previo a la gala, donde entre pose y pose dejó ver la mitad de uno de sus pechos. Muy elegante con un diseño de Dolce&Gabbana, la actriz mostró su anatomía, así como un pequeño tatuaje bajo su ya famoso seno. Una imagen que ya ha dado la vuelta al mundo, y ha sido duramente criticada.

Desde luego a Miley le queda bien poco de la inocente Hannah Montana que cautivó a niños y padres. Ahora sigue haciéndolo con los más jóvenes, pero no con sus progenitores. Estos están con la mosca detrás de la oreja por la última afición de Cyrus, que consiste en salir de fiesta y beber cerveza.

Tras su sensual actuación sobre el escenario de los MTV, enfundada en un ceñidísimo body y unas medias de rejilla, la cantante revolucionó la fiesta after show con su energía. Con otro look, un vestido de cuero bien cortito, la joven de diecisiete años tuvo un comportamiento excesivamente desenfadado durante la celebración, según los allí presentes. Más tarde, se marchó con su amiga Kesha de fiesta a la discoteca Pachá.

Por todo esto y unas fotografías donde aparece bebiendo alcohol, está recibiendo duras críticas en su país, donde beber a su corta edad va contra la ley. Tal es el revuelo que el Instituto Internacional para la conciencia sobre el alcohol está en pie de guerra contra la actriz afirmando que "los jóvenes que la ven como un modelo a seguir podrían imitar su comportamiento".