La Audiencia de Sevilla condenó ayer a un año de cárcel a un hombre que en octubre de 2021 abusó de una joven que estaba orinando en una calle del entorno de la Carretera de Su Eminencia, en concreto junto a las cocheras del Metro. El acusado, que fue enjuiciado en la Sección Primera, se mostró conforme con el acuerdo que su abogado, Germán Saldaña, alcanzó unos minutos antes con la Fiscalía, así que el tribunal dictó sentencia firme en la misma sala y lo único que queda por resolver es qué ocurrirá con la suspensión de la ejecución de esa pena de prisión. Las magistradas, tras una breve deliberación, acordaron rechazar la solicitud de la defensa basándose en que su cliente tiene antecedentes y está cumpliendo condena, pero esa decisión es recurrible.

Los hechos ocurrieron sobre las 21.30 horas del 27 de octubre de 2021. La víctima, de 19 años, estaba reunida con su pandilla en los alrededores de la zona donde se guardan los coches del Metro de Sevilla y en un momento dado se apartó junto a una amiga para hacer sus necesidades en la calle Águila Perdicera. Fue entonces cuando Youssef R. apareció por sorpresa y le realizó distintos tocamientos. Tras superar el sobresalto inicial, la víctima y su acompañante se resistieron y empezaron a gritar para reclamar ayuda. Las voces fueron oídas por otro de sus amigos y por el vigilante de seguridad de la estación de Metro, que acudieron inmediatamente en su auxilio.

Durante el consiguiente forcejeo, el encausado llegó a romper las gafas del vigilante privado. Por eso la condena incluye que lo indemnice con algo más de 1.100 euros. Youssef R., además, estará inhabilitado durante un año para dedicarse a cualquier trabajo o actividad que implique contacto con menores de edad.

La Sección Primera condenó al investigado como autor de un delito de abusos sexuales según el artículo 181.1 de la Ley Orgánica que en 2019 reformó el Código Penal de 1995 en lo relativo a los delitos contra la libertad sexual. Es la legislación “más favorable” para el reo, recalcó la fiscal. El año de cárcel es la pena mínima por esa infracción, que castiga a quien “realizare actos que atenten contra la libertad o indemnidad sexual de otra persona sin violencia o intimidación y sin que medie consentimiento”.

Desde la cárcel de Palencia a Sevilla

Youssef R. llegó a la Audiencia esposado y custodiado porque venía de la cárcel, pero no de la de Sevilla ni la de Morón de la Frontera, sino de mucho más lejos. En concreto está recluido por otros hechos en el centro penitenciario La Moraleja, más conocido como cárcel de Dueñas, que está ubicada ni más ni menos que en la provincia de Palencia, a más de 600 kilómetros de los juzgados del Prado. Para localizarlo de cara al juicio celebrado ayer, de hecho, tuvo que ser declarado en busca y captura. Por tanto, cruzó media España para llegar a la vista (con escala en Madrid) y ahora tendrá que hacer lo mismo para la vuelta.