Comer el cadáver de un humano es probablemente una de las últimas opciones de los gatos, pero las mascotas de una mujer rusa que vivía en la localidad de Batausk (región de Rostov) se vieron en la obligación de comerse a du dueña después de que hubiera fallecido dos semanas atrás y nadie hubiese reclamado su cuerpo.
Fue un compañero de la empresa donde la mujer trabajaba quien alertó a los servicios de emergencias que la mujer llevaba varias semanas ausente de su puesto laboral. La Policía fue al domicilio de la mujer y se quedaron completamente horrorizados al ver el el descompuesto estado del cuerpo y descubrir quiénes lo dejaron de esa forma.
Según la investigación de los forenses, la señora tenía hasta 20 gatos de raza como mascotas y tras varios días sin recibir alimentos se vieron en la obligación de comerse el cuerpo de su dueña. Según publica el diario británico The Sun, los uniformados comentaron que se trataba de una auténtica escena de terror. Todavía no se han esclarecido las causas exactas del fallecimiento.
Gatos con pedigree
Los animales de la fallecida eran gatos con pedigree de la raza maine coon, una de las más grandes de todas. Tal y como explicó un rescatista, los felinos se vieron en la obligación de comer el cuerpo porque "no había comida; entonces, ¿qué más iban a comer? Es comprensible, ¿verdad? Se comieron lo que había".
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