La película lejos del Villamarín

El partido del Betis | Análisis

El Betis encajó el gol de la derrota en otra acción del rival en la pizarra

Joel arregló la falta de consistencia defensiva entre el pivote y los centrales

Los hombres clave, lejos de su nivel

Bartra y Mandi intentan frenar a Williams.
Bartra y Mandi intentan frenar a Williams. / Miguel Toña / Efe
Juan Pinto

21 de junio 2020 - 07:00

El Betis siguió una temporada más sin ganar en el nuevo San Mamés, donde firmó un encuentro idéntico a otros de este curso lejos del Benito Villamarín: condenado por jugadas de pizarra a balón parado, sin pegada en momentos clave, sin ser consistente en defensa, con jugadores importantes muy por debajo de su nivel... Y un entrenador, Rubi, con números muy pobres y engullido por una gestión deportiva muy deficiente en cuanto a la planificación deportiva. Así, el resultado de todo acabó reflejándose, en esta ocasión, en el terreno de juego del feudo bilbaíno.

La pizarra.
La pizarra. / Dpto. de Infografía

No habían transcurrido ni dos minutos y en el afán bético de sacar el balón jugado desde atrás llegó un fallo de Mandi que casi aprovechó el Athletic para abrir el marcador, algo que ocurrió poco después. Presión alta de los rojiblancos, que aprovechan una falta cerca del área ante la pasividad de la zaga bética para marcar en una acción de pizarra ejecutada por Íñigo Martínez. Mientras, el Betis, con Borja Iglesias, Guido, Bartra y Lainez como novedades en el once, intentó reaccionar y tuvo una ocasión para empatar por medio de Fekir, que se durmió en el remate para que Unai tocara la pelota.

Esa acción espoleó al equipo de Gaizka Garitano, que no dudó en mandar balones en largo a la espalda de la zaga bética buscando la velocidad de Williams y las incorporaciones por los carriles de Yuri, bien apoyado por Córdoba, y Capa. Así, a la vuelta de la caseta, un balón en profundidad de Dani García a Williams obligó a aparecer Joel para evitar el segundo gol. Entonces, Rubi movió el banquillo y abrió el campo con Álex Moreno y Tello, y Canales tomó el mando en la medular para dejar solo a Borja Iglesias, que perdonó, y mandar alto un penalti a poco para el final. Lo intentó el Betis, incluso, en una falta de Fekir que obligó a lucirse a Unai Simón, pero en el alargue, con muchos espacios en la medular, el Athletic pudo matar e choque.

Defensa

El triángulo Mandi-Bartra-Guido tiene cero consistencia en este Betis. Los centrales sufrieron con Williams y luego el ratito que jugó Villalibre. Muniain se movió entre líneas como quiso ante un Guido que no aporta ese salto de calidad que demandaba el equipo verdiblanco en el puesto de pivote. Emerson y Pedraza tuvieron intensos duelos con Yuri y Capa.

Ataque

En el primer tiempo, Borja Iglesias fue durante muchos minutos una isla y su aportación ofensiva escasa. Lainez intentaba asociarse algo, Fekir aparecía muy poco y sólo algún centro de Guardado a la espalda de la zaga rojiblanca hizo daño a los locales. En la segunda mitad, Rubio dio varios pasos al frente y e Beis tuvo el empate, pero perdonó y se chocó contra un Athletic que acabó ganando.

Virtudes

El Betis nunca bajó los brazos en busca del gol del empate.

Talón de Aquiles

El Athletic se llevó el triunfo en el enésimo gol que los verdiblancos encajan en acciones a balón parado, de pizarra. Fue tremenda la pasividad defensiva y la falta de concentración en un Betis inmerso en una dinámica negativa que se vio reflejada en el campo.

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