Junta General Ordinaria de Accionistas

Una Junta de reproches

  • El consejo, del que nadie pidió su cese, aprueba todos los puntos del día bajo un ambiente crispado.

  • La gestión deportiva y económica generó crispación con la oposición de Castaño.

Sin la posibilidad de poner en cuestión la permanencia del actual consejo –ningún accionista lo solicitó tras la constitución formal de la Junta General y tampoco aparecía entre los puntos del orden del día–, la misma quedó reducida a la defensa del actual modelo de gestión del club, que contó con un apoyo de casi el 28% de los accionistas en todos sus puntos, y también reducida a los reproches, sobre todo entre el consejo y Manuel Castaño y algunas personas cercanas a Manuel Ruiz de Lopera, lo que generó por momentos un ambiente de tensión.

Fue una Junta General áspera, con una excesiva crispación entre los intervenientes y con una división profunda entre Manuel Castaño, con colaboradores tan íntimos como uno de sus hijos, y el consejo actual. El ambiente fue más tenso que en las últimas Juntas e incluso hubo más que de un roce entre opiniones discrepantes. La situación deportiva, muy criticada pese a que posteriormente se aprobó la gestión, provocó numerosos encontronazos, al igual que el capítulo referido a las cuentas, que el consejo defendió con sus argumentos.

"Si ser hombre de fútbol significa parecerse a Castaño, nunca seré un hombre de fútbol", espetó el presidente, Ángel Haro. "No sé si somos los buenos, pero somos honrados, eso está claro", continuó el máximo dirigente bético, del que tomaron el testigo el vicepresidente, José Miguel López Catalán,y el consejero Rafael Salas. "Me gustaría hablar de la unidad de los béticos. Creo que la unidad está ahora en casi su totalidad conseguida. En el día de hoy han votado sí más de 2.750 accionistas y han votado que no, 99. Eso es prácticamente la unanimidad del beticismo. Los que están al otro lado son cuatro gatos y diez palmeros. Todos los béticos de buena fe tienen sitio en el Betis", dijo Catalán. "Afortunadamente los béticos sabemos quién es quién. Cuánto tiempo tuviste para poder velar por el club, tú ahora no estás velando nada. Este consejo te ha abierto las puertas. No critiques tanto y trabaja por el Betis", apuntó Salas a Castaño.

"Ha sido un año de transición resuelto satisfactoriamente, nuestra candidatura ha puesto las bases del Betis del futuro, más profesionalizado y con los cinco sentidos puestos en el crecimiento futbolístico. El equipo acabó décimo, una plaza aceptable para un equipo recién ascendido", justificó Haro en la gestión de la pasada temporada. "Ustedes no saben de fútbol", fue repetido una y otra vez por más de un accionista de los que se acercó al estrado.

Si la gestión deportiva generó fricciones, otro tanto ocurrió con las cuentas. "No hay deuda si se entiende como líquido exigible. Es lógico que aumenten los pasivos, el crecimiento de cualquier sociedad conlleva un crecimiento de los mismos. Seguro que los pasivos del Madrid y del Barcelona multiplican el del Betis. Hay unas obligaciones de pago, pero hay unos activos con los que se pueden hacer frente. Los activos reales del Betis superan con creces los activos contables. Adán y Dani Ceballos tienen valor cero como activos contables y en el mercado sí lo tienen", expresó José María Pagola, el consejero encargado de presentar los números.

"Las cuentas no tienen nada que ver con la realidad contable del Betis. Son irreales", expuso Castaño, que criticó el aumento del pasivo pese a los mayores ingresos del club en Primera. "No nos podemos equivocar tanto en los fichajes, pero estas cuentas son las de una sociedad que se dedica el fútbol", apuntó José Antonio Tirado, presidente de Por nuestro Betis, que comunicó ese voto a favor de la asociación a la que representa.

El Betis aprobó el presupuesto de más de 66 millones para la actual temporada, en el que continúa teniendo una gran importancia los derechos televisivos, que ya fueron el 67% de la pasada temporada. "Seguimos creciendo en un año difícil por la transición de Segunda a Primera".

Reproches entre accionistas y con las palabras del consejo sobre su vigilancia del tema deportivo, la Junta llegó a su final para que los actuales dirigentes continúen guiando al Betis.