Aitor Ruibal indicó que el Ludogorets, rival este jueves en la quinta jornada de la Europa League, "más que sorpresa, es un gran equipo", de cuya calidad dice mucho "que estén compitiendo bien en la Europa League".

El futbolista bético espera "a un rival duro, como se pudo ver en Sevilla", donde el Betis sufrió mucho para ganar 3-2, y advirtió que "en su campo van a apretar", por lo que "habrá que estar al tanto porque tienen jugadores buenos arriba y son peligrosos", aunque el Betis va a "salir a ganar", pese a que con un empate se garantiza matemáticamente la primera plaza del grupo.

El futbolista catalán lamentó "el viaje largo" que espera a la expedición bética hasta Bulgaria y el regreso "también largo el viernes por la mañana" antes de volver a jugar el domingo en San Sebastián, "pero al final es lo que tiene jugar esta competición" y él está "contento de jugarla".

Ruibal, reconvertido esta campaña a lateral, derecho, señaló que le "lo importante es jugar donde el equipo lo necesite" y aunque ha "jugado siempre arriba", debe "aprovechar" el poderse "adaptar a otros puestos", para lo que recibe "los consejos" de Héctor Bellerín, compañero suyo la pasada temporada y actualmente en las filas del Barcelona.