Irregular e imprevisible

El rival del Betis

Paco López ahorma un Levante que pretende mejorar en la faceta defensiva para mantener el desborde y la calidad de sus atacantes

Paco López, entrenador del Levante.
Paco López, entrenador del Levante. / Efe
Samuel Silva

24 de septiembre 2019 - 05:21

Sevilla/Por segundo año consecutivo, Paco López dirige desde el inicio a este Levante que quiere consolidarse en la máxima categoría y no pasar los apuros que vivió el pasado año para alcanzar la permanencia. Con refuerzos en todas las líneas, el equipo granota quiere dejar atrás esa irregularidad que lo castigó el pasado año y que lo condenó a la parte baja de la clasificación.

Quizá los dos mejores partidos del Levante en la campaña anterior fueron con los verdiblancos como rivales, con el triunfo en el estreno liguero en el Benito Villamarín en una exhibición al contragolpe (0-3) y la contundente victoria en la segunda vuelta con la que casi confirmó su salvación (4-0).

Con apenas 72 horas desde su último partido ante el Eibar, Paco López anunció cambios para medirse al cuadro heliopolitano, con lo que jugadores que vienen disputando menos minutos pueden tener su oportunidad. Aunque el técnico granota suele apostar por una zaga de cuatro, en la visita al Bernabéu sí varió para salir con cinco atrás.

Sin balón

La mejora de la faceta defensiva es uno de los aspectos en los que más viene insistiendo Paco López, que quiere encontrar ese equilibrio desde el que continuar creciendo. El Levante trata de juntar las líneas para minimizar los espacios e incluso Paco López está ubicando a un medio de un perfil más defensivo –Vukcevic– para acompañar a Campaña con la intención de darle más solidez a su conjunto, sobre todo cuando actúa como visitante.

La referencia de la pasada temporada, con un Levante esperando en campo propio y permitiendo el toque bético en la salida, también es válida para lo que viene realizando este año.

Con balón

Con jugadores de buen pie como Campaña, Rochina o Bardhi –este último es baja por lesión– en la medular, los de Paco López son un equipo que sabe manejar la pelota, aunque que trata de darle verticalidad siempre a su fútbol con transiciones rápidas que permitan aprovechar la velocidad de Morales, Borja Mayoral o el propio Sergio León.

Esa capacidad para montar contragolpes es una de sus mejores armas como visitante, como ya comprobó el equipo verdiblanco la pasada temporada.

Los laterales suelen mantener la posición defensiva, aunque tanto a Clerc como a Toño, los dos del perfil izquierdo, sí les gusta desdoblarse en ataque para aprovechar sus golpeos de balón.

En este campeonato, además, Paco López viene apostando por jugar con dos delanteros, lo que lo convierte en un equipo que busca centros para aprovechar esos remates de los puntas. Aunque viene jugando en corto para salir desde atrás, el hecho de contar con dos referencias arriba provoca que también usen el golpeo en largo para evitar la presión alta del rival.

Lo mejor

El liderazgo y la velocidad de Morales; o la calidad de los golpeos de Campaña, Bardhi y Rochina en las acciones de estrategia.

Lo peor

Le cuesta recuperar balones en campo contrario, lo que lo lleva a replegarse en exceso; le falta fiabilidad defensiva, pese a que viene siendo uno de los aspectos en los que más ha incidido su entrenador.

Sergio León.
Sergio León. / Daniel Rosell

Un canterano que sabe buscarse la vida

Sergio León Limones (Palma del Río, 6-01-1989) es un delantero criado en la cantera del Betis, a la que se incorporó con 15 años, pero que ha jugado la mayor parte de su carrera lejos de Heliópolis. Tras debutar de la mano de Víctor Fernández, el palmeño pasó por Reus, Murcia, Llagostera y Elche antes de debutar en la máxima categoría con Osasuna. Su buena temporada en el equipo navarro, con el que anotó diez goles en la Liga, le valió su fichaje por el equipo verdiblanco, en el que militó las dos últimas campañas, aunque su participación fue decreciendo hasta quedar en el ostracismo para Setién. Esto lo puso en la puerta de salida y Sergio hizo nuevamente las maletas para fichar por el Levante, donde de nuevo se busca la vida como tan bien sabe hacer dentro del campo para convertirse en un incordio para las zagas rivales.

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