Momentos de tensión en la presentación del Instituto Confucio en Sevilla. El estreno de uno de los principales proyectos de la Universidad de Sevilla (US) en internacionalización se ha visto empañado en su inicio por la protesta de dos miembros de la comunidad universitaria que han exhibido pancartas contra dicha institución, que persigue el intercambio cultural y lingüístico entre China y España.

El acto se desarrollaba en el Paraninfo del Rectorado de la Hispalense, cuando un hombre y una mujer han saltado al estrado donde se encuentran los participantes en la presentación tras la bienvenida del rector de la US, Miguel Ángel Castro. En las pancartas desplegadas han advertido del riesgo que entraña el Instituto Confucio, donde tiene gran presencia la República Popular China.

Entre otras amenazas, han alertado de que todo el conocimiento que se obtiene en el Instituto Confucio es aprovechado luego para uso militar del Gobierno chino.

Los manifestantes han permanecido varios minutos en el estrado mientras el acto ha seguido el guion previsto, pero en un momento dado uno de los asistentes ha alzado la voz para lamentar dicha protesta y exigir la retirada de sus protagonistas. Ha sido el momento más tenso en el que una manifestante ha recordado que se trata de una protesta "pacífica" que en ningún momento interrumpía el acto.

Las palabras del rector

A la exigencia del asistente ha respondido el rector de la US, quien ha pedido un aplauso para la intervención minutos antes y mediante vídeo de Zhao Lingshan, vicepresidente de la la Fundación de Educación China Internacional. Castro ha lamentado el intento de “obstaculizar el acto”. Ha resatado el papel de la universidad como espacio de enseñanza, investigación, templo del conocimiento, del saber y corazón de la educación. En este sentido, ha subrayado que el carácter de la Hispalense se traduce en el “ejercicio constante de la fraternidad, el respeto mutuo entre las personas, la templanza académica y la tolerancia”. “Por ello, no caben en nuestros espacios más dignos el uso de conductas contrarias a estos principios”, ha insistido.

Minutos después han aparecido en el Paraninfo varios vigilantes de seguridad que han desalojado a los manifestantes, quienes han abandonado la sala reclamando un espacio universitario con "libertad de expresión".

El acto ha continuado con una actuación instrumental de alumnos del Instituto Confucio y con la intervención de los participantes de la ceremonia, seguida en chino y español.