"La aristocracia no sabe nada de temas de sindicalismo"

Juan Manuel Moreno Díaz. Historiador

. Profeta en su tierra, ha viajado desde el Derecho Laboral al esplendor universitario de la Osuna que se codeaba en el siglo XVI con Alcalá y Salamanca

Juan Manuel Moreno, en la calle que Sevilla le puso a su paisano de Osuna Antonio Rodríguez Buzón.
Juan Manuel Moreno, en la calle que Sevilla le puso a su paisano de Osuna Antonio Rodríguez Buzón.
Francisco Correal

30 de enero 2016 - 05:03

UNA singular historia de España sin salir de su localidad. Es lo que hace Juan Manuel Moreno Díaz (Osuna, 1968), que nació ocho días antes que el rey Felipe, que hoy cumple 48 años.

-Hemos elegido la calle Antonio Rodríguez Buzón, que salió a hombros tras dar el pregón de la Semana Santa de Sevilla...

-Antes dio el de Osuna. También tiene calle en Sevilla su sobrino Manuel Rodríguez-Buzón. Estuvo al frente de la Obra Cultural de la Caja San Fernando y con su amigo Rafael Manzano salvó la Colegiata de Osuna, que se caía. Sus hermanos Patricio y José María, el director de teatro, están al frente de la Asociación Amigos de los Museos de Osuna.

-¿Por qué Osuna no se reivindica como Vélez-Málaga por aparecer en el Quijote en el cuarto centenario de la muerte de Cervantes?

-No sale muy bien parada. Rodríguez Marín, cervantista que llegó a ser director de la Academia de la Lengua, escribió el libro Cervantes y la Universidad de Osuna, donde restituye su importancia y viene a decir que no fue la mejor pero tampoco la peor.

-Blanco White también la menciona en Cartas de España. Sale mejor parada que Olvera...

-Es uno de los personajes de mi libro. Creo que en ese libro menciona el dicho En Osuna y Orihuela todo cuela.

-¿Qué le llevó a reescribir la historia de esos 39 personajes?

-Fue el instituto Rodríguez Marín donde hice el Bachillerato. Ahora es un centro universitario adscrito a la Universidad de Sevilla en el que soy profesor y durante ocho años fui su director. Lleva 21 años vinculado a la Universidad Hispalense. Ésta es de 1505 y la de Osuna de 1548. Dura hasta el siglo XIX, en que cierran una serie de universidades menores.

-¿Qué criterio ha seguido?

-Mi guía han sido los cuadros que están en el Paraninfo de la Universidad, en la llamada Sala Girona, no por la ciudad catalana sino por los Téllez-Girón, que fueron primero condes de Ureña y después duques de Osuna. Don Juan Téllez-Girón, cuarto conde de Ureña y padre del primer duque de Osuna, es un personaje central. Gracias a él tenemos la Universidad y la Colegiata.

-Retratos de Varones Ilustres. La única mujer es Rosario Andújar, alcaldesa de Osuna, que firma el prólogo del libro...

-Mujeres no hay ninguna. En la galería de retratos sólo había una, María de la Cueva, mujer de Juan Téllez-Girón, que en el cuadro parece un hombre.

-¿Qué se estudiaba en Osuna?

-Había tres Facultades que he utilizado para dividir los retratos. Teología, aquello era una fábrica de curas que iban para canonjías, incluso para América, incluidos obispos de Buenos Aires o Arequipa (Perú); Cánones y Leyes; y Medicina, una medicina muy básica y rudimentaria. Y estaba la Facultad de Artes por las que tenían que pasar todos para dar Trivium y Cuadrivium.

-¿Quiénes son los Téllez-Girón?

-Una casa nobiliaria del siglo XV. Vienen de Valladolid y se asientan en Fuenteovejuna y Belmez. Cambian Osuna por esas dos plazas cordobesas. Eran grandes guerreros y militares.

-¿Un personaje histórico?

-El poeta Manuel María de Arjona y Cubas, hermano mayor del asistente Arjona, que es el que tiene la calle en Sevilla. Un poeta del círculo de Alberto Lista, Blanco White y Reinoso que creó la Academia de Buenas Letras. La casa donde nacieron los hermanos Arjona es ahora el Museo.

-¿En este Juego de Tronos del Siglo de Oro, precedente de la serie que se rodó en Osuna, cuál es el personaje más literario?

-Pedro Salazar de Mendoza. Dio Cánones y Leyes. Amigo y protector del Greco, su mecenas en Toledo. Su retrato fue al museo Benaki de Atenas a la exposición Amigos y Patronos de El Greco en el centenario del pintor. Historiador y genealogista. Le decían el Linajudo porque hacía las biografías a cambio de dinero.

-¿Qué estudió usted, Teología, Cánones o Medicina?

-Soy del área jurídico-laboral. Profesor de Derecho Sindical. Sindicatos, comités de empresa.

-Un mundo ajeno a duques y condes...

-La aristocracia, de temas de sindicalismo, no sabe nada.

-¿Siempre trabajó en Osuna?

-Estuve un tiempo de profesor en la Universidad Carlos III, donde fui profesor de Derecho Laboral. Allí hice la tesis doctoral sobre la objeción de conciencia en materia laboral. Me la dirigió Manuel Ramón Alarcón. En 2004 volví.

-¿Esta historia pasará a la historia del Arte?

-Los autores de los cuadros son pintores de los siglos XVIII y XIX. No son muy conocidos. El trabajo lo hicieron entre tres pintores.

-¿Qué hace ilustres a estos varones, usando el título del libro?

-La invención de la imprenta y la técnica del grabado juegan un papel fundamental en la difusión de la gloria y hazañas de estos personajes.

-¿Todos estudiaron allí?

-Todos menos Fray Diego de Cádiz, misionero y predicador gaditano, y Manuel Merry y Colón, que no estudió pero dirigió el instituto que sigue a la Universidad.

-¿Ursaonenses por el avistamiento de osos en la zona?

-Eso es leyenda. El periodo que reflejo en el libro corresponde a una época de esplendor de Osuna, pero la ciudad tiene un enorme patrimonio histórico con su pasado ibérico, fenicio, romano.

stats