Investigadores sevillanos descubren un mecanismo que causa fragilidad cromosómica en la anemia de Fanconi

El hallazgo ha sido liderado por el departamento de Genética de la Universidad de Sevilla y el Instituto Cabimer

Matronas e investigadoras en la élite nacional

El equipo de investogadoras junto al doctor Iván V. Rosado.
El equipo de investogadoras junto al doctor Iván V. Rosado. / M. G.

Un equipo de investigadores sevillanos, liderado por el doctor Iván V. Rosado, del Departamento de Genética de la Universidad de Sevilla y el Instituto Cabimer, ha descubierto un nuevo mecanismo molecular que causa fragilidad en los cromosomas de las células afectadas por la anemia de Fanconi. El hallazgo, fruto de una colaboración nacional e internacional, arroja luz sobre las causas de esta enfermedad genética rara.

El mecanismo identificado se basa en la unión extremadamente fuerte, de forma covalente, de proteínas al ADN, formando lo que se conoce como DPCs (del inglés DNA-Protein Crosslinks). Estos DPCs bloquean físicamente los procesos naturales de copiado y lectura del genoma. Concretamente, la proteína de reparación del ADN llamada HMCES se adhiere a sitios dañados del ADN recién duplicado, provocando las roturas del ADN que desencadenan la fragilidad cromosómica observada en los pacientes con anemia de Fanconi.

Este descubrimiento permite comprender mejor por qué las células de estos pacientes acumulan cromosomas frágiles, lo que a su vez incrementa la probabilidad de desarrollar tumores de cabeza y cuello. Además, el hallazgo trasciende la anemia de Fanconi, ya que las células con defectos en el gen BRCA2, frecuentemente mutado en tumores de mama y ovario, también presentan inestabilidad genética debido a la formación de DPCs entre HMCES y el ADN.

La información genética de cada célula está expuesta de manera constante al ataque de productos químicos, ya sea provenientes de la dieta o generados como desecho durante el metabolismo celular. Por fortuna, la evolución ha dotado a las células de múltiples genes que trabajan en grupos especializados, denominados rutas, para reparar eficientemente los diferentes tipos de roturas del ADN.

Cuando un gen de una de estas rutas de reparación no funciona correctamente, se inactiva la ruta completa, lo que provoca fragilidad cromosómica y da lugar a enfermedades genéticas como la anemia de Fanconi. Esta enfermedad pediátrica rara causa fallo en la médula ósea y la aparición de tumores, principalmente en cabeza y cuello, debido a un mantenimiento defectuoso del ADN que no se repara adecuadamente.

El estudio de la formación de DPCs se perfila como fundamental para el desarrollo de nuevas terapias dirigidas a su eliminación, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes oncológicos. Comprender los mecanismos moleculares subyacentes a la fragilidad cromosómica es clave para diseñar estrategias que frenen la inestabilidad genética y la formación de tumores.

Este descubrimiento supone un avance significativo en la comprensión de las bases moleculares de la anemia de Fanconi y abre nuevas vías de investigación para abordar no solo esta enfermedad, sino también otros tipos de cáncer relacionados con defectos en la reparación del ADN. El trabajo constante de los investigadores españoles y sus colaboradores internacionales sigue arrojando luz sobre los complejos mecanismos celulares, acercándonos cada vez más a potenciales tratamientos.

¿Qué es la anemia de Fanconi?

La anemia de Fanconi es un trastorno genético raro que afecta principalmente a niños. Se caracteriza por una serie de anomalías congénitas, fallo progresivo de la médula ósea y una alta predisposición a desarrollar cáncer, especialmente de cabeza y cuello. Esta enfermedad está causada por mutaciones en los genes responsables de reparar el ADN dañado, lo que resulta en una acumulación de roturas y una alta inestabilidad cromosómica en las células afectadas.

Los pacientes con anemia de Fanconi requieren un seguimiento médico estrecho y tratamientos como transfusiones de sangre, administración de factores de crecimiento hematopoyéticos o trasplante de médula ósea para abordar las complicaciones de la enfermedad. La investigación continua es esencial para desarrollar terapias más efectivas y específicas que mejoren la calidad y esperanza de vida de estos pacientes.

stats