La lucha contra las altas temperaturas en los colegios sigue en verano: “Así no se puede estar"
La red de Escuelas de Calor denuncia que la Ley de Bioclimatización sigue sin cumplirse cinco años después, mientras cientos de niños asisten en julio a campamentos escolares con temperaturas extremas
Los colegios de Sevilla alzan la voz contra las "aulas-sauna" ante el riesgo de legionela
El curso escolar acabó a finales de junio, pero todos los colegios se vacíanopr completo en verano. En Sevilla, julio es sinónimo de campamentos escolares: una solución para muchas familias que no pueden permitirse más vacaciones que las escolares. Niños y niñas de infantil y primaria siguen llenando aulas, patios y comedores convertidos en espacios de conciliación… aunque a menudo bajo condiciones térmicas insoportables.
A pesar de que esta semana, el calor ha dado una pequeña tregua, en Sevilla, lo habitual es superar los 40 grados a diario. De este modo, Teresa Pablo, portavoz del colectivo Escuelas de Calor, vuelve a alzar la voz ante el incumplimiento de la Ley de Bioclimatización, para la mejora de las condiciones térmicas y ambientales de los centros educativos andaluces mediante técnicas bioclimáticas y uso de energías renovables, del año 2020: “Cinco años después, la mayoría de centros sigue sin una climatización adecuada. Y lo que están haciendo ahora, no vale”, asegura.
El colectivo se ha reunido esta semana con representantes del PSOE y Adelante Andalucía en el Parlamento andaluz para exigir medidas reales. “Nos han escuchado, han mostrado interés, pero seguimos sin confiar del todo. Ya hemos visto demasiadas promesas sin cumplir”, dice Teresa, tras el encuentro.
Uno de los principales puntos de fricción es el sistema que se está implantando en muchos colegios: la refrigeración adiabática, que funciona mediante el enfriamiento del aire exterior con agua. “Eso no es aire acondicionado. Si fuera hay 42 grados, ese sistema te mete aire a 37 ó 35. No cumple con el confort térmico que marca la ley”, recuerda.
Refrigeración adiabática
Asimismo, critican que se esté invirtiendo dinero público en una solución que consideran inadecuada para espacios escolares: "Esto está diseñado más bien para granjas o naves industriales, no para colegios con pasillos estrechos y menores que pasan allí seis o siete horas al día. Y se está haciendo sin auditorías previas, que son obligatorias por ley”, explican. La Consejería de Educación presume de haber instalado este sistema en 462 centros de Andalucía, pero, según Teresa, "ello requiere además un gasto desborbitado, hemos calculado que el mantenimiento de las aulas andaluzas puede llegar a los1,8 millones de euros anuales. Y sin ese mantenimiento, esos equipos no solo dejan de funcionar, sino que pueden generar problemas de salud. Y no todos los centros reciben lo mismo. ¿Cuál es el criterio además para seleccionar los centros?”, se preguntan.
En Sevilla capital, al menos una veintena de centros se han movilizado en los últimos meses. “Muchos colegios tiran de recursos de las familias para climatizar las aulas. Si no tienes una comunidad muy concienciada, no se consigue nada”, lamentan.
Desde Escuelas de Calor recuerdan que hay alternativas más sostenibles que el aire acondicionado, porque entienden que no es la fórmula para garantizar la refrigeración, pero denuncian que el modelo de refrigeración adiabática, a su juicio, no es el adeduado: “No pedimos aire acondicionado en cada clase, pero sí que se aplique la ley de forma seria. Porque esto no va solo de confort, va de salud”.
La organización tiene previsto reunirse próximamente con el proyecto piloto de Cartuja 93 para explorar posibles soluciones. Mientras tanto, denuncian el silencio de la Junta de Andalucía al respecto: “Ellos creen que con instalar estos sistemas nos vamos a callar. Pero no vamos a parar. Vamos a seguir con nuestro activismo para garantizar el bienestar de los alumnos", apunta.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por Sharemusic!
CONTENIDO OFRECIDO POR AMAZON