Una mano tendida ante las caídas domésticas

Emergencias

El Cecop atendió los seis primeros meses del año más de 600 incidentes de este tipo, la mayoría en la Macarena

Personal de la Umies atiende a una persona mayor
Personal de la Umies atiende a una persona mayor / M. G.
Cristina Díaz

06 de agosto 2018 - 05:18

Una vecina del distrito San Pablo-Santa Justa llamó la semana pasada al servicio de emergencias 112 pasada las doce de la noche pidiendo ayuda. Su marido, enfermo de párkinson, se había caído al suelo y no podía levantarlo. No necesitaba asistencia sanitaria, sólo a alguien con más fuerza que ella que pudiera ayudarle a incorporar a su marido. Este tipo de incidente no es una emergencia, entra dentro de un ámbito de indefinición que, en principio, no es competencia de los Bomberos ni de la Policía.

En Sevilla existe desde 2010 un dispositivo coordinado por el Centro de Coordinación Operativa (Cecop) del Ayuntamiento para atender este tipo de incidentes, en su mayoría caídas en domicilios de personas mayores. Sólo Madrid, Barcelona y Bilbao cuentan con un dispositivo similar, según indican desde la delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores, responsable del dispositivo junto a la de Bienestar Social y Empleo. Lo llaman La levantá.

Los casos son muy diversos. Desde una personas que se resbala en la bañera o que se cae en medio del pasillo y no puede levantarse hasta una pareja de ancianos con artrosis que está en la cama y cada uno se gira hacia el lado opuesto y no pueden darse la vuelta, o una persona obesa que se sienta en el váter, se queda enganchada y no tiene nada para agarrarse y poder incorporarse. "Estos casos que parecen una tontería ocurren con más frecuencia de lo que nos creemos", indican desde el Ayuntamiento de Sevilla.

Un bombero intenta acceder por la ventana a una vivienda
Un bombero intenta acceder por la ventana a una vivienda / M. G.

Durante el primer semestre de este año se atendieron 623 incidencias de este tipo, la mayoría en el distrito Macarena (111), seguido del Casco Antiguo (81) y Nervión (70). El distrito con menos actuaciones fue Bellavista-La Palmera, donde la población es más joven. En 2017 se registraron 1.507 casos, y en 2016, 1391, siendo siempre Macarena la zona con más casos en estos últimos tres años (18%), según datos de Emergencias Sevilla.

La mayoría de los afectados son personas de más de 70 años, personas con obesidad mórbida o jóvenes con movilidad reducida o con una discapacidad. En muchas ocasiones son los propios vecinos los que dan la voz de alarma cuando lo escuchan gritar.

El aviso llega al Cecop a través del teléfono del servicio de emergencias 112, el 092 (Policía Local), el 080 (Bomberos), 091 (Policía Nacional) o el servicio de teleasistencia de la Junta. El operador del Cecop evalúa la situación y activa los recursos necesarios. Si el afectado no necesita asistencia sanitaria, está acompañado o un vecino tiene llave de la casa, acude sólo la Unidad Municipal de Emergencias Sociales y Exclusión Social (Umies).

Sólo Madrid, Barcelona y Bilbao cuentan con un dispositivo similar al de Sevilla

"Conforme sube el nivel del problema, se activan más recursos, como la Policía o los Bomberos en el caso de que el accidentado haya echado la llave por dentro y haya que entrar por la ventana, por el balcón o derribar la puerta", informan desde el gobierno local. "Siempre se intenta no derribar la puerta porque, por lo general, son personas mayores y sus recursos son escasos. Si se derriba la puerta, le causas un nuevo problema".

Para los agentes que intervienen, lo peor de estas actuaciones es cuando se encuentran problemas asociados, como la soledad de los ancianos, la presencia de animales, ancianos con síndrome de Diógenes, sin luz o que llevan varios días sin comer. En estos casos, una vez resuelto el problema principal, el caso se deriva a los servicios sociales.

Varios policías locales gestionan las llamadas que entran a través del 092
Varios policías locales gestionan las llamadas que entran a través del 092 / M. G.

"Hace algunos años acudimos a la llamada de una señora mayor ciega con recursos económico cero. La casa salió ardiendo y no tenía nada. A través de los recursos sociales se buscó a unos voluntarios de una ONG que pintaron el domicilio, y la mujer pudo volver a su casa a los pocos días", informan desde el Cecop.

Hay otros casos en los que el aviso llega tarde. A finales de julio, varias personas del distrito Macarena alertaron de que hacía varios días que no veían a su vecino, un señor mayor que vivía solo y el domicilio desprendía un mal olor. Hasta el lugar acudieron los Bomberos, la Policía Nacional y el 061. El hombre estaba muerto.

stats