Menos de un año de diferencia con un nativo inglés en capacidad lectora. Se trata del objetivo logrado por el Colegio Internacional San Francisco de Paula con su sistema de aprendizaje de inglés basado en la enseñanza fonológica (los sonidos), cuyos resultados han sido avalados recientemente por una investigación universitaria.

Niños de siete años que logran leer en el idioma anglosajón con la misma destreza que un nativo de seis. Tal realidad ha sido constatada por Sara Rendón, una alumna de doctorado de la Universidad de Sevilla, quien ha desarrollado un estudio en el referido colegio privado, donde desde bien temprano los alumnos siguen un plan bilingüe en inglés. Para ello, los maestros utilizan un método para la lengua materna (el español) que combina la enseñanza fonológica -es decir, el reconocimiento del sonido de cada letra- con el aprendizaje a través de frases y textos familiares, ya sea a través de canciones, juegos y proyectos. 

Para el inglés emplean un método similar, conocido como Jolly Phonics, que se usó por primera vez en Inglaterra en 1975. Este sistema de aprendizaje se diseñó para niños que presentaban problemas de lectura. Para solucionar este déficit, a diferencia de como se hace en la enseñanza habitual, el sonido de las letras no se trabaja por orden alfabético ni por su nombre, sino divididos por grupos, en función de su dificultad para ser pronunciadas. "En un primer grupo están letras como la s o la t, más fáciles de pronunciar, y en un nivel más avanzado, los diptongos", aclara Rendón.

Esta novedad permite que el menor asimile cuanto antes los sonidos de cada letra, lo que contribuye a que su capacidad lectora sea mayor, hasta el punto de que la diferencia con un nativo inglés se reduce a menos de un año. "Un niño de siete años lee igual que uno de seis que haya nacido en Inglaterra". Ésta es una de las conclusiones del referido estudio. 

La enseñanza bilingüe se desarrolla en el San Francisco de Paula desde los tres años.

El aprendizaje fonológico que se hace simultáneo del español y el inglés facilita, además, mejorar el habla y la lectura de ambos idiomas. Es, por así decirlo, "una relación directa entre ambas lenguas", de ahí que la autora de la investigación considere oportuno que este sistema se implante en todos los centros bilingües, tanto públicos como privados. 

"Al haber estado trabajando la conciencia fonológica desde Infantil los alumnos llegan a conseguir un alto nivel de habilidades, por lo que se sitúan en una fase léxica muy avanzada en el proceso de lectura", asevera esta experta, quien considera que en España se han realizado pocos estudios sobre el aprendizaje de idiomas.