El Grupo del PSOE en el Ayuntamiento de Sevilla ha presentado al gobierno local su propia propuesta de aplicación del decreto de exclusión social en un intento por lograr el consenso con el PP en esta materia y rentabilizar esta medida de la Junta de Andalucía. La iniciativa, según sus cálculos, permitiría generar 1.398 contrataciones, 848 de ellas de tres meses, 200 de dos meses y 350 de 30 días. Y, de momento, ha sido bien acogida por el gobierno local, que se ha mostrado dispuesto a estudiarla con detalle.

El Ayuntamiento de Sevilla tiene de plazo hasta el próximo día 22, fecha tope para formalizar su propuesta y acogerse a esta línea extraordinaria de subvenciones. El tiempo corre en contra, pero ya está previsto que en unos días se celebre una reunión con la oposición para definir el proyecto.

La medida del Gobierno andaluz presenta varias limitaciones. De entrada prevé contrataciones urgentes de entre 15 días y 3 meses de duración para contratos por valor de mil euros mensuales y que deben estar en marcha antes de seis meses; las ofertas son para personas que lleven más de un año en desempleo y con unos ingresos familiares mínimos y estén en riesgo de exclusión social; hay zonas que tienen prioridad, en Sevilla, el Polígono Sur, Torreblanca, Polígono Norte, Tres Barrios-Amate y el Vacie. Estos requisitos reducen bastante el impacto que pueda tener la medida.

Por ello, el PSOE ha ideado 15 líneas de contratación que abren bastante este abanico. De entrada, propone que se beneficien del decreto los sevillanos que llevan en el paro más de cuatro años y que, en la capital, son 11.481 personas.

Las contrataciones serán ayudas de emergencia de muy corta duración y el PSOE propone que se eviten los contratos de 15 días. Además, los socialistas pretenden que esta oportunidad sirva de experiencia piloto para darle continuidad a algunos proyectos posteriormente a través de programas municipales, de autoempleo o incluso de iniciativa privada. La propuesta persigue que la puesta en marcha de estos contratos supongan el menor gasto corriente posible, en maquinaria o materiales, para el Ayuntamiento de Sevilla. Y, por último, se dará prioridad a las zonas con necesidades de transformación social, a las que irían a parar más de 2 millones de los 3,3 destinados a Sevilla y más de 700 contratos.