Un policía nacional libre de servicio detuvo el pasado 28 de enero a un ladrón que había entrado a robar en el colegio Ángel Riviere, un centro de educación especial para niños con autismo. Los hechos ocurrieron sobre las seis y diez minutos de la tarde en este centro docente, ubicado en la avenida del Deporte. A esa hora, el agente acababa de pasar en coche con su familia por la puerta del colegio, y había visto a un individuo escalando la valla perimetral del centro.

El policía detuvo su vehículo unos metros más adelante y se dirigió al colegio, donde vio al sospechoso tratanto de salir del recinto hacia el exterior. Llevaba unas plataformas de andamio para poder saltar de nuevo la valla y huir con lo que había robado. Iba sangrando por una mano, ya que se había cortado al fracturar el cristal de una furgoneta, en cuyo interior había robado. El agente detuvo al ladrón y llamó a sus compañeros de la comisaría de Sevilla Este para que se llevaran al detenido a las dependencias policiales y examinaran el interior del centro educativo. El policía está precisamente destinado en el grupo de investigación de la comisaría de Sevilla Este.

El ladrón, de 50 años, se cortó con un cristal de una de las furgonetas que forzó

También fue avisado el responsable del colegio, que presentó a los policías los fotogramas captados por las cámaras de videovigilancia del edificio. En ellos se observaba al sospechoso escalando la valla para acceder al colegio y en el interior del mismo. Los policías comprobaron que dentro del recinto había dos furgonetas cuyos cristales habían sido fracturados con una piedra. El interior de los vehículos estaba revuelto.

Los agentes también vieron que los capós de las furgonetas estaban entreabiertos, posiblemente porque el ladrón había intentado sustraer las baterías y otras piezas del motor. En uno de los vehículos había restos de sangre, como también había gotas junto las dos plataformas de andamiaje con las que el delincuente pretendía saltar de nuevo la valla. Por ello, los agentes se llevaron detenido al ladrón. Antes de trasladarlo a la Jefatura, fue llevado al centro de salud de Alcosa, donde le curaron las heridas de la mano. El detenido es un hombre de 50 años y nacionalidad española cuya identidad responde a las iniciales J. M. C.