El 155 rivaliza con el 13 y el 7

"Los décimos acabados en 13 y 7 siempre son los más buscados, pero este año los catalanes han hecho que el 155 se acabe en un momento". Así definía el encargado de una céntrica administración de lotería la demanda que ha recibido de décimos para la Lotería de Navidad. Con él coinciden muchos loteros de Sevilla, que han detectado como el artículo 155 de la Constitución se ha hecho famoso desde su aplicación en Cataluña el pasado mes de octubre.

"El 2 y el 4 son feos para la mayoría", comenta una lotera con una clienta en la puerta de un establecimiento. Las supersticiones juegan un papel fundamental en este sorteo navideño. Por ello, administraciones como El Gato Negro de la Avenida o Los Millones de la calle Sagasta aún acumulan colas en sus puertas a menos de 48 horas para que los bombos comiencen a girar. Los más rezagados tienen todavía la oportunidad de hacerse con uno de los 165 millones de décimos que se ponen a la venta.

Además de la habitual búsqueda de números concretos, los loteros destacan el aumento en las ventas con respectos a años anteriores y la importancia que ha tenido el pasado puente de la Inmaculada, que multiplicó las ventas en esas jornadas en las ubicadas en el centro de Sevilla. Los vendedores se congratulan de la mejora de la economía española y destacan que se van abandonando progresivamente la compra colectiva de décimos y las participaciones.