En el peor partido del Sevilla de Diego Alonso, el técnico no puso un pero a la derrota, consciente de que fue superado claramente por el Arsenal, por lo que invitó a todos a resetear ante el importante partido del domingo en el que recibirá al Betis.

Era el sexto encuentro con el uruguayo al frente y sólo ha ganado al Quintanar. En el resto de choques siempre puso un bloque parecido y en Londres tiró de rotaciones con ocho cambios, con el obligado de Nyland por Dimitrovic por lesión. ¿pensaba en el derbi? "La idea era tener energía en el campo, porque veníamos de muchos partidos seguidos y lo primero era tener un equipo dinámico con los tres futbolistas en el medio y por fuera con dos jugadores rápidos como Pedrosa y Lamela", explicó.

"El plan del partido era diferente y plantar cara al rival. Nos costó, nos superaron, nos dominaron y nos dejaron mucho tiempo lejos de su portería rival", añadió el preparador nervionense, que apuntó: "Recuperábamos demasiado atrás y ese no era el plan. No le quitamos el balón en ningún momento y recuperábamos muy atrás, en nuestra área, porque nos superaban mucho en las áreas cuando la idea era quitarle el balón en el centro del campo", aseguró.

Es por ello que el técnico se queda con "la sensación de que el equipo se vio superado". "Fueron mejores y lo debemos aceptar, pero ahora tenemos el domingo una oportunidad de revertirlo todo en el derbi ante nuestra gente para demostrar de lo que somos capaces. El derbi será otra historia y el equipo no está tocado. Hay que dar la cara por la institución, el club y por nosotros mismos y dar lo máximo", indicó.

Diego Alonso no quiso poner excusas por la clara derrota e incidió en que "el domingo supone una oportunidad para cambiarlo todo". "Le di la importancia que merecía este partido de Champions y le daré ala importancia que merece el encuentro del domingo", insistió el charrúa, que quiere "redimirse cuanto antes y el derbi es una gran oportunidad". "Es el partido que estamos esperando y el que nos puede ayudar a dar el salto", valoró. 

Finalmente, destacó que no teme por Pedros, que acabó algo acalambrado, mientras que "con Soumaré hay que esperar". "No sabemos qué le pasó y habrá que valorarlo".