El Sevilla pretende dar un salto cualitativo y cuantitativo importantísimo en la línea de negocio y relaciones comerciales del club, todo aquello que suponga ingresos ajenos a la actividad deportiva y las plusvalías de la compraventa de futbolistas. La elección de una persona de la vastísima experiencia en este marco como Jorge Paradela, ex directivo de Heineken, y la creación ad hoc de un nuevo alto cargo ejecutivo, director general de negocio, tiene que ver con ese salto que pretende ser longitudinal y transversal, a nivel local y en el plano internacional. De hecho, Paradela ha ingresado directamente en el comité ejecutivo.

En su primer comité de dirección, que es como llaman los altos ejecutivos del Sevilla a las asambleas, con orden del día incluido, de su comité ejecutivo, Paradela ya formó parte del mismo como un miembro más. Se sentó junto a todos los miembros del mismo excepto Monchi, seguramente enfrascado en gestiones propias de esta época de mercado, aunque también lo visitó en su despacho.

Así, el comité ejecutivo ahora consta de siete personas, que incluyen al presidente del club, José Castro; los dos vicepresidentes, José María del Nido Carrasco y Gabriel Ramos, los tres directores generales, José María Cruz, Monchi y Jorge Paradela; y el subdirector general Jesús Arroyo.

Además, la dirección general de negocio acoge a los tres departamentos relacionados con la línea de relaciones comerciales y de imagen del Sevilla, que antes no tenían una estructura piramidal única: márketing, antes dependiente de Ramón Loarte, hasta su salida; comunicación, al cargo de Jesús Gómez; y tícketing, dentro del área social, con Javier Llanes. Todo queda bajo el manto de la nueva dirección general específica para relaciones comerciales, imagen y negocio.

Aparte de darle forma al primer patrocinador del Sevilla, que aún está en el aire en un contexto de crisis, Paradela quiere aumentar la presencia internacional del club, con la tremenda trayectoria del equipo como mejor embajador. Pero también pretende darle una vuelta de tuerca al trato del club hacia el aficionado de a pie, el sevillista de toda la vida, el abonado fiel de carné. En su entrevista a SFC Radio habló también de sostenibilidad, de digitalización continua... y de mirar y de darle su sitio al socio. Ahí la modernidad no debe estar reñida con la tradición.