El Sevilla Atlético firmó el cuarto empate consecutivo gracias a una acción postrera que fue producto de la conexión entre Zarzana y Mateo Mejía. El delantero hispano-colombiano cabeceó de forma perfecta, imperial, un centro medido del jerezano, que reapareció de forma providencial tras superar su lesión muscular y en su primera acción propició el gol del empate.

Fue un alivio para el filial sevillista ese tanto en el minuto 89, después de haber sufrido muchísimo ante un Manchego Ciudad Real que, en su lucha por salir de la zona de descenso, presionó de lo lindo en su feudo, un campo con pista de atletismo y un ambiente desangelado en una tarde fría.

De hecho, Alberto Flores mantuvo vivo al Sevilla Atlético hasta el final. Sobre todo en una mano milagrosa, espectacular, felina, a un cabezazo a bocajarro del ariete Peter, en el minuto 69. Fue la acción más plástica de la tarde, aunque el gol del equipo manchego, a la hora de juego, también fue espectacular.

El Manchego estaba poniendo coto al área sevillista, con un ataque detrás de otro, después de una primera mitad en la que también había llevado la iniciativa del partido.

Con su presión adelantada, impedía la salida limpia del filial sevillista. Así, por ejemplo, llegó un primer aviso serio que sería la antesala del 1-0. Robo en un intento de salida de la zaga franjirroja, este sábado de rojo con la franja en blanco, y el balón llega a Carlos Jiménez, cuyo disparo intencionadísimo se va al larguero ya con Alberto Flores batido.

Seis minutos después, en el 61, llegó el tanto del equipo manchego. Córner sobre el área sevillista y el rechace de la defensa lo caza en la frontal del área, algo escorado hacia el flanco derecho, Pablo Kawecki soltó un zurdazo sobre la marcha, cuando la acción pedía un derechazo, que halló la escuadra. Imposible para Alberto Flores.

El filial intentó reaccionar, pero el Manchego estaba muy bien plantado y posicionado en el campo y le impedía salir con fluidez. Así las cosas, incluso pudo aumentar la ventaja, si no hubiera mediado la mano salvadora del meta sevillista. Hasta que llegó el gol de Mateo Mejía, el tercero en su séptimo partido en el filial, un soberbio cabezazo que también es deudo del excelente centro del recién salido Zarzana.

El Sevilla Atlético duerme líder en espera de lo que haga este domingo el Yeclano, al que supera en dos puntos, contra el UCAM Murcia. El domingo próximo recibirá el filial en el Jesús Navas al Estepona, cuarto clasificado a ocho puntos del filial.