El Sevilla FC entrena buscando un resquicio de luz al final del túnel

Después de un día histórico a nivel nacional, con un apagón que dejó a España prácticamente incomunicada durante gran parte del día, el Sevilla Fútbol Club ha realizado su segunda sesión de entrenamiento en esta semana que podría marcar el devenir del combinado hispalense. Los de Joaquín Caparrós, que aún no ha sido capaz de ganar en ninguno de sus dos partidos al frente del cuadro blanquirrojo, reciben en el Ramón Sánchez-Pizjuán a un Leganés que también se está jugando gran parte de su futuro. Cabe recordar que los pepineros ocupan la decimonovena posición en la tabla con 30 puntos, mientras que los nervionenses están cinco puestos por encima con siete puntos de ventaja.

Este martes, la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios ha recuperado la normalidad y la mañana ha comenzado sin problemas para el primer equipo sevillista. Las ausencias de Akor Adams, Albert Sambi Lokonga, Rubén Vargas y Tanguy Nianzou han sido las únicas en un entrenamiento que ha contado con la presencia de los canteranos Lulo Dasilva, Álvaro García Pascual, Leandro Antonetti, Ramón Martínez y Manu Bueno. Cabe recordar que Dodi Lukebakio no estará tampoco disponible para el choque del domingo, pues vio una cartulina roja en el duelo frente a Osasuna, que terminó en derrota y supuso un recibimiento propio de otra época a la expedición hispalense.

Sin esquema ni gol

Joaquín Caparrós ha variado bastante entre los dos equipos que ha alineado en su cuarta etapa como técnico del Sevilla Fútbol Club. Con las ausencias de Kike Salas y Nemanja Gudelj en su primer y segundo partido respectivamente, el utrerano se ha visto obligado a realizar cambios tanto en la defensa como en la medular, mermada más aún por la cuarta lesión de un Sambi Lokonga cuya continuidad en Nervión parece imposible a estas alturas de la temporada.

Con Isaac Romero cada vez más lejos de aquella irrupción estelar que tuvo lugar a mediados del pasado curso, víctima también de un proceso vírico que le ha obligado hoy a entrenar al margen de sus compañeros, García Pascual se antoja como un revulsivo necesario para darle al equipo ese gol que tanto falta. El lebrijano únicamente suma tres tantos en LaLiga este curso, y la falta de eficiencia en la parcela ofensiva del conjunto nervionense es uno de los principales problemas de un año que se ha ido tornando cada vez más oscuro, más aún teniendo en cuenta que el equipo lleva sin ganar desde el pasado 9 de marzo frente a la Real Sociedad en Anoeta.

Este próximo domingo, los jugadores del Sevilla Fútbol Club tienen la opción de dar un golpe encima de la mesa y alejar lo máximo posible los fantasmas de un descenso que se siguen cerniendo sobre la entidad blanquirroja. Además del choque frente al Leganés, el encuentro de la jornada 36 ante la Unión Deportiva Las Palmas se antoja crucial para afrontar con la mayor tranquilidad posible un final de curso en el que los de Joaquín Caparrós recibirán al Real Madrid y cerrarán la temporada en La Cerámica contra el Villarreal.