La meningoencefalitis vírica es una enfermedad del sistema nervioso central originada por un virus, que provoca la inflamación de las meninges y el encéfalo, ubicado en el cerebro (meningitis y encefalitis). Si bien esta enfermedad puede ser contraída por cualquier persona, su incidencia es mayor en niños.

Esta afección también puede estar causada por bacterias, hongos y otro tipo de gérmenes. De hecho, alrededor de un 10 por ciento de los casos que se producen en el mundo provienen del virus herpes HSV1, causante también de los los herpes labiales comunes, y del HSV2. Asimismo son frecuentes las infecciones por adenovirus y enterovirus.

En cuanto a las consecuencias, una meningoencefalitis que no es tratada puede llegar a ocasionar daños neurológicos como dificultades en el habla o para pensar.

La incidencia de meningoencefalitis entre la población, en niños es de entre 1,5 y 7 casos por cada 100.000 personas y año. Es más frecuente en menores de un año y entre 5 y 10 años, y en los meses de verano y otoño.

Síntomas de la meningoencefalitis vírica

Entre los síntomas más frecuentes de la meningoencefalitis vírica se encuentran fiebre, dolor de cabeza, sensibilidad a la luz, rigidez en el cuello, falta de orientación y, en algunos casos, puede incluso provocar convulsiones e inconsciencia.

También pueden presentarse brotes, dolor de garganta y síntomas intestinales.

¿Cómo se contagia la meningoencefalitis vírica?

Debido a que la meningitis viral puede ser causada por una serie de virus diferentes, hay varias vías de transmisión. Puede ser contagiada a través del contacto con las pequeñas gotas expulsadas al hablar, toser y estornudar.

Otra forma común es a través de la picadura de insectos como el mosquito.

Cómo prevenir la meningoencefalitis vírica

La Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica ha elaborado unas recomendaciones con el fin de prevenir la transmisión de la meningocefalitis vírica por picaduras de insectos.

Entre las acciones preventivas se recomienda emplear telas mosquiteras en ventanas y puertas, intentar no permanecer al aire libre entre el atardecer y el amanecer, procurar dejar la luz apagada, seguir diariamente una correcta higiene corporal, evitar los perfumes intensos.

También es conveniente usar ropa que cubra lo máximo posible la piel y sacudirla antes de usarla si se ha tendido en el exterior, hacer un uso adecuado de los repelentes, siguiendo estrictamente las recomendaciones sobre el modo y frecuencia de uso descritos por el fabricante y, si se usa crema para el sol, aplicarla primero, dejar absorber durante veinte minutos y, entonces, aplicar el repelente de mosquitos. 

Tratamiento de la meningoencefalitis vírica

No existen medicamentos ni antibióticos específicos para el tratamiento de la meningitis viral, pero sí hay tratamientos para mejorar los síntomas consistentes en la administración de analgésicos, antipiréticos, sueros para mantener la hidratación y, en casos de convulsiones, fenitoína y benzodiacepinas.