DERBI Betis y Sevilla ya velan armas para el derbi

SOCIEDAD

Cómo secar las sábanas y toallas para que no cojan olor a humedad

Mujer cambiando las sábanas en una habitación

Mujer cambiando las sábanas en una habitación / Volha Flaxeco

¿Cuándo se acaba el intenso frío que azota Andalucía? Bajan las temperaturas, sacamos los abrigos y la sensación es casi siempre la misma. Qué bien, un poco de frío hacía falta. Como cuando llueve. Pero cuando el poco se prolonga demasiado tiempo la mente y el cuerpo de la mayoría de andaluces vuelve a reclamar el sol y el calorcito. Ese que te permite caminar sin sentir dolor en los pies o con las manos en los bolsillos (y no para sacar la cartera). Estas semanitas de frío polar han servido también para dificultarnos ciertas tareas del hogar. Como tener perfectamente preparadas nuestras sábanas y toallas a la hora de salir de la ducha o dormir cómodamente en nuestros dormitorios ¿Por qué? El frío dificulta el secado de nuestras prendas y nos obliga a redoblar nuestra habilidad y esfuerzo en dichas lides si no queremos seguir sintiendo la humedad en sus tejidos ¿Cómo secar las sábanas y toallas para que no cojan olor a humedad? Aquí os lo explicamos

Lo normal es que durante el invierno, con menos horas de sol, lavar las prendas, tenderlas y esperar a que se sequen resulten un verdadero quebradero de cabeza. Si secar un simple calzoncillo ya cuesta, ni que decir tiene cuando nos enfrentamos a sudaderas, toallas, sábanas, mantas o edredones. Toca tener paciencia, estar muy pendiente de las horas en las que da el sol de pleno sobre las prendas para exponerlas y retirarlas cuando empiece a caer de nuevo la engorrosa humedad. Eso, o gastarse el dinero en una secadora que nos eche una mano...y que también suba la factura de la luz.

Trucos para secar sábanas y toallas en invierno

Sábanas secándose en un tendedero Sábanas secándose en un tendedero

Sábanas secándose en un tendedero / PIXABAY

Es por ello que existen una series de claves y consejos para conseguir arroparnos sintiendo el frescor de nuestras sábanas suaves y sin asperezas y el fino tacto del algodón de nuestras toallas al salir de la ducha. ¿Cuáles? Toma buena nota

  • Lo primero que debemos hacer es poner programas cortos en la lavadora y con centrifugado. Esto hará que la ropa salga menos mojada.
  • El siguiente paso es tender inmediatamente después de sacar la ropa de la lavadora. Nada de dejarla dentro durante horas después de darle al botón de apagado, o reposando en una bolsa como si fuera el arroz de mediodía. Este proceso es fundamental para evitar la humedad en las prendas.
  • La tercera clave está en dónde tender. Esta gran diferencia entre el sol y la sombra con temperaturas tan frías hace que únicamente se recomienda secar en exterior cuando la ropa vaya a estar a pleno sol. 
  • También resulta importante el cómo se tiende. Hay que tender las sábanas y las toallas bien separadas y con pinzas de la ropa. Cuanto más estiradas estén, antes se secarán antes, menor humedad acumularán y menos olores sentiremos.

Además de estas cuatro claves fundamentales, también existen otra serie de recomendaciones y de utensilios que nos pueden ayudar a la hora de terminar ciertas partes de las sábanas y toallas que no salen únicamente con el sol. Podemos usar secadores manuales o radiadores, colocar un deshumidificador en la sala de la plancha donde pongamos el tendedero en caso de necesidad o aumentar el número de lavadoras que ponemos con menor cantidad. Necesitaremos más tiempo y gastaremos más en luz, pero acortaremos los tiempos de secado.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios