Realme alcanza los 300 millones de usuarios

El fabricante asiático Realme ha anunciado que supera los 300 millones de usuarios globales, una cifra que refleja el crecimiento imparable de las marcas chinas en el sector de los smartphones.

La cifra alcanzada por Realme, fundada en 2018, equivale aproximadamente a la población conjunta de España, Francia e Italia.

Para ponerlo en perspectiva, la marca ha conseguido en siete años lo que a otras empresas tecnológicas les ha llevado décadas: construir una base de usuarios comparable a la de regiones enteras.

La estrategia generacional: Realme y la conquista de los jóvenes

Detrás de los 300 millones de usuarios de Realme hay una estrategia de marketing específicamente diseñada para atraer a usuarios jóvenes.

La compañía ha convertido la edad en su principal ventaja competitiva, orientando tanto sus productos como su comunicación hacia las generaciones más jóvenes.

El 828 Global Fan Festival, que Realme celebra cada agosto para conmemorar su aniversario, ejemplifica esta aproximación.

El evento del año pasado en Shenzhen reunió a más de 200 medios internacionales y fans de la marca, donde se presentaron innovaciones como el sistema de carga de 320 vatios.

No es solo una presentación de productos, sino un espectáculo diseñado para generar engagement y sentimiento de pertenencia.

La marca ha desarrollado colaboraciones estratégicas con franquicias populares entre los jóvenes: desde el anime Dragon Ball y Naruto hasta el videojuego FreeFire y la guía de viajes Lonely Planet.

Estas alianzas no son casuales, sino que responden a un análisis detallado de los intereses de su público objetivo.

Realme ha conseguido crear una comunidad global de más de 15 millones de fans activos, una cifra que muchas empresas tradicionales envidiarían.

Esta comunidad no solo consume productos, sino que actúa como prescriptora y genera contenido promocional de forma orgánica en redes sociales.

La estrategia tiene lógica empresarial: conquistar a un usuario joven significa potencialmente décadas de fidelidad a la marca.

Si Realme consigue que un adolescente de 16 años elija su primer smartphone de la marca, es probable que mantenga esa preferencia durante años, renovando dispositivos y recomendando la marca a amigos y familiares.

Para Realme, como expresan en sus comunicaciones, los 300 millones de usuarios "representan 300 millones de historias reales", una forma de humanizar las cifras que conecta con la sensibilidad de las generaciones más jóvenes, acostumbradas a valorar las experiencias por encima de las especificaciones técnicas.

Esta aproximación generacional explica, en parte, por qué las marcas chinas, en este caso Realme, han conseguido ganar terreno tan rápidamente en mercados tradicionalmente dominados por Samsung y Apple.

No compiten solo en precio o tecnología, sino en conexión emocional con segmentos específicos de la población. Además, La mayor variedad de opciones ha presionado los precios a la baja y ha acelerado la incorporación de nuevas tecnologías.