Piquetes con carteles blancos

La mitad del público de Sálvame se quedó en un atasco y llegó tarde al plató, pese a que el programa no se ofrecía en directo. Y Jorge Javier Vázquez se reía a carcajadas. Los aplaudidores de Telecinco (de la presidiaria Ocaña, Toledo) llegaron en manifestación una hora tarde gritando "a esto no hay derecho". Ya. JJ se iba por la pata. Por la patilla. Fue la repercusión más evidente de la huelga general en una cadena privada, con El intermedio de refrito. En el anterior paro, con ZP aún vivo, La Sexta tenía más programas propios paralizados. Qué tiempos. Los de Otra movida, en Neox, aseguraban que al tener más gente en el sofá los despistados "se lo iban a pasar mejor que en el trabajo". No sé qué pensarían sobre este incorrecto comentario de Flo los 5 millones de parados.

La huelga se hizo bien visible en las públicas, como se preveía, pero mucho más en las cadenas de Canal Sur que en las de TVE. En lugar de culebrón hubo 75 Minutos y en lugar de La mañana de La 1, un repetido especial del Dúo Dinámico: se están dando ideas de programación. A José Luis Barcelona, la sonrisa catalana de los años en blanco y negro, le pareció mal, por cierto, que aquel dúo que iba a presentar en la SER tuviera un nombre en inglés. Les dijo a Manolo y Ramón que se iban a llamar el Dúo Dinámico y aquellos pipiolos, tan nobles y compresivos, se convirtieron así en las estrellas juveniles del desarrollismo. Ahora son asteroides cascabeleros de la crisis, con Serrat cantando el La, la, la.

La última patada del miércoles a cargo de Jackie Chan, después del insulso partido del Barça, estaba perfectamente sincronizada con el reloj. Tras cambiarse el título inicialmente previsto, la película de Canal Sur, El poder del talismán, buen nombre, colocaba sus títulos finales justo a medianoche, cuando Álvaro Moreno de la Santa daba paso a las primeras imágenes de los piquetes para, cinco minutos después, ceder al cartelón de despedida y cierre provisional. En el Canal Sur 2 la champañesa Valerie Tasso se despidió con Manu Sánchez invitando a que digamos a nuestros amantes qué nos gusta. Toma Moreno. La semana más larga en la noche más corta. A las 12.10 los canales de la RTVA (el uno, el dos y el HD) eran los únicos que estaban en el limbo de toda la TDT. Aún así, Andalucía, como siempre, imprevisible e imprevista, seguía la señal en blanco impuesta por los "sindicatos de clase". En La Nuestra, la que no pisó Javier Arenas durante la campaña electoral, había ganas de parar. Y, por un día, había un lote de películas chungas para suplir a la plantilla.

A esa hora de la medianoche un canal de RTVE, Teledeporte, ofrecía un programa en directo sobre la Champions, mientras el informativo 24 Horas daba paso a programación enlatada, a medio gas. Horas antes de que Ana Pastor dejara de servir el desayuno, Mario Picazo andaba exiliado por Siberia en La 1. Archipiélago Gulag. Y Punset, en La 2, hablaba en Redes sobre la inteligencia artificial, pero parece que ni encargando inteligencia nos vamos a salvar del atolladero que tenemos por delante.

La hora de los apagones de otros tiempos encontró que seguían en directo los siempre instructivos debates de Futboleros y de Punto pelota, en Intereconomía, cadena especializada en boicots y caras de facha, que aguardaba con un especial mañanero en busca de broncas. Telecinco ofrecía CSI Miami, mientras los habitantes de Gran Hermano iban a su bola, cómo no, de charleta y tertulias de edredones. Los vampiros de Blade mordisqueaban por las nocturnidades de Cuatro, Alcatraz seguía en La Sexta y en la MTV… sí, ahí estaban Alaska y Mario.

Canal Sur HD fue la única cadena que se llevó las 24 horas en blanco. Canal Sur, tras un boletín, reanudaba su programación al amanecer con dos documentales de The most extreme, uno sobre los animales que saltan más y otros sobre los más glotones. La gran comilona, como profetizó Marco Ferreri.

María Antonia Iglesias, como surgida de un baúl, daba caña con Ana Rosa Quintana, y ninguno de los dos grandes matinales, El programa de AR y Espejo público, quisieron bajar la guardia este jueves de piquetes, vista la Guerra Fría que se disputan entre ambos, entre la rubia y la morena. Entre Griso y Ana Rosa. Tiene arreglo, un nombre que necesitamos oír en estos tiempos sin futuro, se quedó en el banquillo. A Canal Sur esta huelga le va a costar quedar por detrás de La 1 en las audiencias de marzo.

Pero tranquilos, no pasa nada, la autonómica superará a la nacional, una auténtica cadena zombi, en el mes de abril.