Indiscutible Morante de la Puebla en el Domingo de Resurreción, la compañía es la deseada para componer el cartel más redondo que pueda componerse en la actualidad. El de La Puebla del Río para, con la compañía de El Juli, flanquear a Andrés Roca Rey en ese paseíllo del luminoso 9 de abril.

Es el acontecimiento con toros de la muy demandada divisa de Núñez del Cuvillo, un hierro de prosapia y que se ajusta a las preferencias de dicha terna. Un cartel de tronío para abrir boca y que asegura el no hay billetes en la taquilla.

Morante de la Puebla, Julián López ‘El Juli’ y Andrés Roca Rey dan el pistoletazo de salida a la temporada taurina en la plaza de la Real Maestranza de Sevilla en la tarde del Domingo de Resurrección, este 9 de abril, lidiando una corrida de Núñez del Cuvillo y acabando con todo el papel disponible en las taquillas del coso sevillano.

Es importante subrayar que el diestro de La Puebla ha aguardado hasta esta fecha para enfundarse por primera vez el traje de torear en la temporada 2023 después de cumplir cien contratos en la pasada campaña, seguramente la mejor de su ya larga vida taurina que ha rebasado el cuarto de siglo de alternativa.

Morante es y se sabe estrella indiscutible del abono que se abre en el coso del Baratillo en el que ha llegado a contratar, como en 2022, hasta seis tardes que resaltan la dimensión de las tres grandes faenas que marcaron su paso por la plaza de la Maestranza el pasado año que seguían la estela de otra memorable actuación ante un toro de Juan Pedro Domecq, el primero de octubre de 2021.

El Viernes de Farolillos de 2022 llegó la primera explosión, cuajando un maravilloso trasteo a un ejemplar templado y rajado de Núñez del Cuvillo al que toreó con exquisita cadencia y sencilla belleza. El propio toreo de La Puebla se encargó de confirmar que aún podía rayar a más altura formando un alboroto inolvidable con el sobrero de Garcigrande que remendó la corrida de Torrestrella.

Si el día anterior había sido la suavidad, en este segundo acto fue la explosión, la intensidad, la reunión… Pero el listón aún subiría más en la primera tarde de la Feria de San Miguel, jugándose la vida sin trampa ni cartón para dictar una obra emocionante y desgarrada que mezcló cadencia y heroicidad.

Roca Rey, el número 1

La inclusión de Roca Rey en el cartel del Domingo de Resurrección era una cuestión de derecho natural, reflejo de sus propios réditos en Sevilla pero, sobre todo, de su condición de primera figura del toreo tal y como enseñó en el propio coso maestrante ante la corrida de Núñez del Cuvillo en coincidencia con uno de los recitales morantistas.

Pero para entender la actual trascendencia de Roca Rey hay que situarse en la Aste Nagusia de Bilbao recordando aquella tarde apabullante con toros de Victoriano del Río que marcó un antes y un después en el desarrollo de la temporada y en la propia vida del diestro peruano que ya será inseparable de un toro, ‘Jabaleño’, que a la vez que le enviaba a la enfermería le estaba ungiendo como figura máxima del toreo.

Finalmente hay que recordar que El Juli se hizo acreedor en 2022 de los principales premios que le acreditaban como triunfador absoluto del ciclo. El madrileño cuajó una faena magistral a un toro de Victoriano del Río en la tarde lluviosa que contempló la eclosión de Tomás Rufo pero iba dar el definitivo campanazo acompasado a las reses de Garcigrande para franquear la séptima Puerta del Príncipe de su carrera. Se alza el telón de la temporada, comienza la fiesta.