Insoportable Nico

DISFRUTAR de las carreras del Mundial de Motociclismo en Mediaset es un suplicio. Desde que hace cuatro años el grupo de Vasile se hizo con los derechos de emisión de la competición, su cobertura ha caído en picado. Desde el año pasado hay que conformarse con ver en directo menos de la mitad de las carreras. Para los aficionados a este deporte es desesperante buscar un bar que esté dispuesto a poner las pruebas en sus televisiones, un canal internacional que las retransmita pese a que no se entienda el idioma o la casa de un amigo que tenga contratado Movistar TV, donde se emiten todas con una cobertura envidiable. El motociclismo se ha convertido en un deporte televisado no apto para todos los bolsillos. Qué mala costumbre la de la televisión española la de maltratar a todos los deportes que no sean fútbol. Además en Telecinco es frustrante cómo hay cada vez más anuncios en los momentos más inoportunos. Irrita ver las últimas vueltas, los momentos previos a la salida e instantes de lucha entre los pilotos en una pequeña ventana en la parte inferior del televisor mientras en otra más grande cobran protagonismo los anuncios. Así es el negocio. Dentro de lo que cabe esto es comprensible pero hay un factor con nombre propio que con el paso de los años ha hecho insoportable la retransmisión: Nico Abad.

¿Quién no se ha enterado aún de que le gustan las motos? Es imposible llevar la cuenta de cuantas veces lo dice durante cada carrera. Pero una cosa es que te gusten y otra que entiendas y sepas contar lo que está pasando. En 2012, primer año que Telecinco se hizo cargo del Mundial de MotoGP, Keko Ochoa fue el encargado de narrar las carreras. Junto a Marco Rocha y Lara Álvarez desde el paddock y el pit lane formaban un gran equipo que hacía disfrutar de las pruebas. Tras sus despidos la cadena acertó con el fichaje de Melissa Jiménez, pero lo estropearon con la llegada de Nico Abad. Cuando se puso al frente del Mundial de Motociclismo para narrar la competición se notaba que no tenía ni idea. Todavía hoy, tras tres años, sigue sin tenerla. A veces dan ganas de quitar el audio y quedarse solo con la imagen porque los gritos de Nico, su falta de precisión en los comentarios y las meteduras de pata cabrean mucho. El presentador se ha convertido en Trending Topic en varias ocasiones. La mayoría de comentarios que se vierten sobre él en Twitter son críticas. En Facebook hay grupos que suplican que Abad no se ocupe de las retransmisiones. Pese a todas las desventajas que tiene seguir la competición en Telecinco hay alguien que sigue haciendo que no se pulse el botón de silencio y que se vean las carreras sea a la hora que sea, aún conociendo ya el resultado, solo por disfrutar de sus exquisitos y profesionales comentarios: don Ángel Nieto. Contar con el maestro es lo único a lo que debe agarrarse Mediaset si nos tienen un mínimo de aprecio a los aficionados de las dos ruedas. Qué Nico Abad dé gracias por tenerlo a su lado. Y de paso, que aprenda un poco, que tiene al lado al mejor para hacerlo.