El teléfono de emergencias de la Junta 112 atendió durante el pasado fin de semana 434 llamadas relacionadas con ruido y consumo de bebidas en la calle en Sevilla capital. Estos avisos se registraron entre las 00:00 del día 3 hasta la misma hora del lunes 6 de octubre. El sábado 4 fue la jornada con mayor actividad, con 182 llamadas, mientras que el domingo se registraron 135. Por franjas horarias, el mayor número de avisos se recibieron entre las doce de la noche y las tres de la madrugada.

Fuentes del servicio de emergencias 112 apuntaron que cuando un ciudadano marca el 112 desde cualquier punto de Sevilla capital, la llamada es atendida inmediatamente por los especialistas. Los profesionales del teléfono único de emergencias de la Junta solicitan unos datos básicos para saber qué está ocurriendo exactamente y dónde está sucediendo.

La información sobre el suceso se traslada, de forma prácticamente simultánea, a los operativos que deben intervenir para resolverlo a través de la aplicación informática, ya que la Policía Local de Sevilla está integrada en la plataforma tecnológica del 112. En esta plataforma quedan registrados no sólo los datos sobre el aviso, sino también los tiempos de atención del 112 y los de activación o aviso al organismo competente.

Según las mismas fuentes, el personal del 112 tarda como máximo tres segundos en descolgar el teléfono al ciudadano que llama para informar de ruidos o de consumo de bebidas alcohólicas en un espacio público.

La conversación entre los especialistas del 112 y los ciudadanos que llaman por esta tipología de emergencia tiene una duración media de 102 segundos, es decir, algo menos de dos minutos. El tiempo medio de activación o aviso a la Policía es de sólo 15 segundos. El servicio de emergencias 112 recordó que gestionó cada uno de estos 434 avisos en un tiempo medio máximo de 120 segundos. Una vez que la información está en manos de la Policía, ya es este cuerpo de seguridad el que se encarga de acudir al lugar. En el caso de la Policía Local de Sevilla, el pasado fin de semana sólo había disponibles 11 agentes para luchar contra la botellona en toda la ciudad.