Griñán reitera que no adelantará las elecciones pase lo que pase en Madrid

Las elecciones autonómicas serán el primer domingo de marzo de 2012. Pase lo que pase con el Gobierno central a cuentas de los momentos convulsos que atraviesa el PSOE a nivel federal. El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, insistió en esta fecha en el primer cara a cara con el líder de los populares andaluces, Javier Arenas, después de las elecciones municipales del pasado domingo en las que los socialistas sufrieron una severa derrota. "El dueño de la fecha electoral es usted. De aquí a las elecciones va a hacer poco. Pero habría que pensar en que lo mejor para los andaluces es que tengamos elecciones separadas, para que estudiemos los problemas y las soluciones propias", reclamó Arenas por tercera vez desde el domingo. Y Griñán contestó: "Que las elecciones sean juntas o separadas depende de dos voluntades. Yo siempre he dicho que serán en marzo de 2012. No depende de mí, sino de mí y del presidente del Gobierno, que tomará su decisión".

El discurso no ha cambiado en los últimos meses, pero sí la constatación entre los socialistas andaluces de que ahora podría haber un adelanto de las elecciones generales si la imagen de Zapatero sigue deteriorando la marca del PSOE y, además, hay un candidato salido de las elecciones primarias. Es más, la opinión de muchos parlamentarios socialistas es que no hay que descartar aún que ese candidato fuerce un congreso para llegar a las elecciones como secretario general. Al fin y al cabo, fue lo mismo que Griñán hizo el año pasado: primero, presidente; después, secretario general en un congreso extraordinario. Desde 1996, cuando se anticiparon las votaciones a Cortes Generales y al Parlamento andaluz, todas las convocatorias autonómicas (2000, 2004, y 2008) han convivido con las legislativas estatales. Para los socialistas existe la certeza de que la coincidencia les beneficia. Arenas, por su parte, cree ahora que unas elecciones separadas le beneficia. Nada más conseguir su primer triunfo electoral en Andalucía el pasado domingo, reclamó como primera y principal reivindicación la convocatoria de elecciones separadas de las generales.

La afirmación de Griñán ante Arenas se adelantó sólo un par de horas al factor influyente que para los socialistas consultados puede originar el adelanto de las elecciones generales: el paso atrás de Chacón a disputar la candidatura a la Presidencia del Gobierno. Una opinión extendida en el PSOE-A es que Alfredo Pérez Rubalcaba -que aún no ha presentado su candidatura, pero se da por segura- reclamará un congreso extraordinario de ganar las primarias para erigirse como secretario general. Ello podría llevar a la convocatoria de elecciones generales anticipadas si Zapatero sigue influyendo en la marca. Según esta versión, los comicios podrían adelantarse a otoño, probablemente en noviembre. En ese caso, Griñán se vería en la tesitura de mantener su palabra u optar por un adelanto que, posiblemente, le beneficiaría. Griñán volvió a mantener ayer que la posición del PSOE en contra del congreso extraordinario es unánime en Andalucía y que, así, se lo trasladaron los secretarios provinciales. Varios con los que ha hablado este medio negaron que antes de ayer por la noche se hablase con ellos. Ante los periodistas, el presidente aseguró lo siguiente: "La posición es unánime de lo que yo diga".