Los jugadores del Betis abandonaron el campo desolados. En el rostro de más de uno incluso se adivinó alguna lágrima. La suerte fue cruel con el equipo y por ahí fueron los comentarios de Matilla, quien ayer regresó al equipo inicial y fue uno de los futbolistas más destacados del equipo.

"Es una pena que en un partido como el de hoy no hayamos sido capaces de hacer ningún gol, es mala suerte, pero no nos queda otra que levantar la cabeza y seguir adelante. Nos vamos de vacaciones y esperemos que haya una buena racha a la vuelta y podamos salir de ahí cuanto antes", comentó el toledano, el único futbolista que apareció por la zona mixta.

Matilla también habló del comportamiento de la afición, que supo apoyar al equipo y exigirle a la vez. "Otro día sí se ha podido ser crítico con el equipo y nosotros mismos lo hemos hecho, pero hoy se le puede reprochar poco al equipo. En días como hoy no se puede hacer mucho más para ganar. De diez veces ganaríamos nueve este partido. No han entrado los goles y eso es cosa de rachas y hay que seguir. Si trabajamos como hoy la bolita entrará, no nos meterán el gol desde su casa y desaparecerán los pequeños detalles que nos están matando y que nos hacen estar ahí abajo", dijo en palabras muy parecidas a las que usa su entrenador, Juan Carlos Garrido.

Luego, al final del partido, el equipo, por orden de su técnico, salió al centro del campo para rescatar la opinión de la grada. "Es una pena que no tengan lo que se merecen por afición, por ánimo y por fuerza. Ellos creen igual que nosotros que esto se puede sacar y hoy era el día para darles una alegría, pero no ha podido ser. Hemos aceptado la derrota en el medio del campo y nos hemos quedado ahí para escuchar, para recibir, para aprender, para aceptar... Y ya digo que no queda otra que agachar las orejas y escuchar lo que te digan. Trabajar más duro para darles lo que se merecen. El equipo ha aceptado las críticas, pero no sólo por este partido. Nos vamos de vacaciones y hoy era el día de aceptar. Hoy lo han dado todo y al final sí es el momento de criticar. Hoy la afición ha hecho su trabajo, ha apoyado al equipo porque jugando, si le pitan a un futbolista, es complicado jugar. Al final sí, lo aceptamos todos. Nos hemos quedado un tiempo para que la afición nos diga lo que quiera", apostilló Matilla.

Chica, que exigió apoyo cuando le pitaban a él, que no al equipo, se excusó luego por Twitter. "Quisiera explicar lo sucedido en el campo, aplaudo a la afición y la animo a que siga animando porque lo estábamos dando todo. En ningún momento exijo nada, sólo que había que seguir apretando para darle la vuelta. No me importa pedir disculpas por si se ha malinterpretado el gesto", escribió.

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